Relatos eróticos esposos cómplices cap 113 - Relatos Eróticos

Relatos eróticos esposos cómplices cap 113

... avergonzada por haberte ensuciado, pero fué sin querer.

Jefe : No te preocupes Ofelia no es la primera vez.

Cómo toda mujer, soy muy curiosa, aún a costa de pasar otra vergüenza.

Yo : Dime, quién más te a ensuciado ?

Jefe : Me gusta qué me hables así, cómo amigos y creo qué seríamos buenos amigos.
Con mi esposa también sucedió lo mismo, la pobre cuántas cosas pasó conmigo para después dejarme sólo.

Yo : Nunca la conocí, tú nunca la llevaste al trabajo.

Jefe : No, yo quería aparentar seguir siendo soltero, para lograr más conquistas. Por éso ella también sufrió bastante.

Yo : Aparte de hacerla sufrir en la cama le hacías éso, eres un perro.

Jefe : Lo reconozco y ahora estoy sufriendo todo lo que hice y trato de hacer cosas buenas para aliviar mi conciencia, pero a veces mi naturaleza me gana.

Yo : Con cuántas mujeres del trabajó has estado ?

Jefe : Con varías, Juana, Ana Nohemí, Julia, Esperanza y otras más.

Yo : A todas las hiciste sufrir 

Jefe : No, yo siempre las traté bien.

Yo : No, yo me refiero al sexo

Jefe : Bueno, qué podía hacer, es lo qué la naturaleza me brindo generosamente.
Si, todas padecieron en la cama, pero después les gustaba. Sólo hubo una qué no sufrió nada. Ana.

Yo : A ella si la conocí, era una flaquita de mi tamaño y trigueñita.

Jefe : Ella misma.

Yo : Y por qué no sufrió con tu tranca ?

Jefe : Por qué a ella le gustaban los novios negros.

Pecando a ser demasiado confianzuda sin mirarlo.

Yo : ...

... Dicen qué los negros las tienen muy grandes.

Jefe : Sí, casi todos. Tú nunca has estado con un negro ?

Yo : Nunca, ésta es la primera vez.

Jajaja jajaja reímos los dos.

En éso entró mi hija con las toallas, qué entre ambos nos secamos, mientras ella nos daba una mirada pícara.

Estando listos él nos invitó a almorzar a la calle y después se iría a trabajar.

Le dijimos qué habíamos cocinado y qué está vez, nosotras invitamos.

Jefe : Está bien, pero queda pendiente.

Me movilizaba lentamente por qué me dolía el culo.

Mi hija me dijo al oído qué mejor me quedara sentada en el comedor a conversar con él y ella nos atendería por qué estoy caminando feo

Jefe : Ofelia ahí te dejo algo de dinero por si necesitas alguna medicina.

Yo : Oh muchas gracias por entender lo qué se siente.
Dime, si tú has trabajado toda tu vida en el ministerio, cómo es qué tienes plata, si ahí no pagan mucho ?

Jefe : Es qué yo recibí de herencia unas propiedades qué hasta hoy sigo rentando.

Yo : Con quién vives ?

Jefe : Sólo y abandonado.

Hija : Señor y sus hijos ?

Jefe : Tengo 4 dos yá tienen familia y los otros 2 viven aparte y también sólos.

Yo ; Y por qué no te vas a vivir con ellos ?

Jefe : Por qué cada uno quiere vivir sólo, por éso es qué se fueron.

Hija : Señor, por qué no se busca una pareja ?

Jefe : Lo intenté y dos de ellas se fueron robándome, otra me pedía mucha plata cada día y la última quería casarse conmigo para ser dueña también de ...