Relatos eróticos esposos cómplices cap 113 - Relatos Eróticos

Relatos eróticos esposos cómplices cap 113

... Ahora te pido qué no seas cruel con tu papá.

Hija : Está bien mamá. Puedo hoy dormír contigo ?

Dormimos cansadas hasta el día siguiente.

Pasamos el día limpiando la casa por qué ése día no habían visitas en la cárcel.

Al otro día visitamos a mi esposo y después de escucharlo le dejamos su propina, yéndo luego a visitar al abogado, quien nos dijo qué estaba trabajando, pero es un trabajo largo, pidiéndome algo más de dinero.

Regresamos a la casa a descansar hasta el día lunes en qué volveríamos a darnos ése mismo trajín.

El domingo llegó el jefe en la mañana trayendo el desayuno, aceptando por qué nosotras seguíamos descansando.

Desayunando pidió disculpas por llegar sin avisar, pero quería darnos una sorpresa y vaya qué lo logró.

Además dijo qué el domingo es su día más triste para él, por qué no trabaja y no tiene nada que hacer.

Yo : Los sábados tampoco trabajas ?

Jefe : Ése día lo dedico en cobrar mis rentas, rentar las qué esten libres, sus mantenimientos y etc.etc. 

Terminando se quedó con mi hija mientras yo me bañaba.
Luego me quedé yo y mi hija se fué a bañar.

Jefe : Ofelia cómo sigues ?

Yo : Yá mejor gracias.

Jefe ; Me alegro, por qué yo también venía con ganas y preferiría hacerlo contigo.

Yo : La verdad es qué el trato está hecho con mi hija y además estamos necesitando más dinero.

Jefe : Cómo se la están viendo para vivir sin ingresos

Yo : Horita, con lo qué tú nos has dado y los gastos son altos, por éso te ...

... digo qué lo hagas mejor con mi hija, por qué a ella le pagas más.

Jefe : Que tantos gastos puedes tener ?

Mi hija al escuchar la pregunta le trajo el papel dónde escribimos los gastos al revisarlo detenidamente.

Jefe : Ésta casa no es propia 

Yo : No, es alquilada.

Jefe : Después de tantos años, no pudo comprarte una casa ?

Hija : Señor, no estamos aquí para cuestionar a nadie sino para ver la forma de ayudarnos.

Jefe : Sí, tienes razón, disculpa.
Quisiera ayudarte pero no sé cómo.
Si te digo qué te vayas a vivir conmigo, mis hijos pueden reclamar.
Si me vengo aquí, sería igual por qué se seguiría pagando alquiler. Déjame pensarlo.

Jefe : Hija, le decía a tu mamá, qué aparte de tomar desayuno con ustedes también venía con ganas.

Hija : Está bien señor, horita nos vamos al dormitorio.

Jefe : Hija, la verdad es qué yo había pensado en tu mamá.

Hija : Ah ya veo, es por qué le sale más barato.

Jefe : No hija, no pienses mal de mi, es qué para serte sincero siempre quedó vivo en mi el cariño qué siempre le tuve y ahora qué la tengo no quiero perder la oportunidad. 
Tú también eres muy bonita y también te deseó, pero con tu mamá hay algo más.

Hija : Si usted no lo hace por el dinero, le propongo algo para ayudarnos entre todos.
Pase todo el día con nosotros y nos toma a las dos. Usted pasa un día feliz y bien acompañado y nosotras tendremos para cubrir nuestros gastos.

Jefe : Tu estudias negocios?

Hija : No señor. Por qué ?

Jefe : ...