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Don Pancho el conserje se cogió a mi hija.
Fecha: 25/11/2024, Categorías: Confesiones Tus Relatos Autor: Anónimo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... comer y en cuanto terminamos don Pancho ya estaba listo para otra ronda. —Mmm, ya se recuperó mi chile bebé hay que ayudar a la digestión cogiendo otro rato. ¿Seguro tu marido nunca te estrenó el culo verdad?— —No don, decía que eso solo lo hacen las prostitutas y las mujerzuelas, pero… vi que usted ya le dió por ahí a mi hija— —Si jaja y ahora voy a estrenar el de la madre.— —Ay no sé don, la verdad eso si me da repelús, siento que me va a doler mucho y… y… no estoy segura— —Tranquila mi reina, tengo un chingo de experiencia desflorando culos, ya sé como hacer que no duela y además todas lo terminan disfrutando tanto cono yo. Ya ves como tu hija no dejaba de gritar como lela jajaja— —Bueno don confío en usted, todo lo que hoy me ha hecho me encantó— —Y esto apenas empieza nalgona, voy a compensarte todos los años que no te di verga. Lo primero, primero es que tienes que enjuagarte bien el culo por dentro— —¿Como?, ¿a que se refiere don?— —Jajaja mira, muchas veces me pasó que cuando les rompía el culo por primera vez a algunas viejas, resultó que tenían restos de mierda adentro jaja y me dejaban la verga toda embarrada con una peste ...
... rompemadres. Desde entonces me cercioro de que se enjuagen bien el culo antes de coger por ahí— —Mmm no la verdad es que no acostumbro lavármelo por dentro, nunca me fue necesario— —Pues mira nalgona que tal si vamos a tu casa y en tu regadera te ayudo a enjuagarte bien todo tu culito, y ya que estamos ahí te lo estreno en tu propia cama— Estaba a punto de asentir cuando mi celular vibró, fui por él y resulto ser un mensaje de mi marido, avisó que llegaría temprano, quizás en 15 minutos. Le comenté a don Pancho y luego de maldecir un poco me dijo que quería verme pasado mañana para continuar mi desvirgamiento anal. Mientras me vestía don Pancho agarró mis bragas y me dijo que se las quedaría. Luego me besó apasionadamente y me dió un ultimo apretón de nalga. —Avisame cuando vaya a venir tu hija eh, me las quiero coger a la vez a ver quien da más batalla jaja— Yo solo lo mire con desaprobación aunque en el fondo sabía que ibamos a terminar encueradas y bien abiertas de patas frente a él porque nosotras somos sus hembras y el nuestro macho. Regresé a mi casa y me senté en el sillón con la mirada perdida y quizá ya preñada, mi vida no fue la misma desde entonces…