Fermín el casero perverso
Fecha: 11/01/2025,
Categorías:
No Consentido
Tus Relatos
Autor: Anónimo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... municipio—
—No me chingues que con el cartel del golfo, y si todo esto es verdad, ¿lo has de saber por experiencia o que?—
—Ya te dije que conocí muchos pobres pendejos que los cornearon, pero hace como cuatro años venía una señora con su hija a vender verduras, muy linda y educada la chamaca, no tenía nada de la putería que luego luego se les nota a algunas. Pues fíjate que el pinche Fermín le echó el ojo a los pocos días y un día que fui a los almacenes los encontré, el cabrón la tenía encuerada y empinada sobre unos huacales mientras le daba por atrás. La pobre muchacha tenía los ojos llenos de lágrimas y el viejo le tapaba la boca para que no gritara mientras le lamía la oreja. En ese momento pensé en matar al hijo de perra, pero me acobardé porque sabía que sus patrones me matarían a mi y a mi familia entera. Me fui de allí y aunque ellas siguieron vendiendo unas semanas, el ánimo de la muchacha era terrible, le rogaba a su mamá que se fueran de aquí y de un día para otro ya no se les vió más. Hubo otra ocasión en que fui a abastecer de abarrotes la escuela de mi hija y mientras descargaba las cosas del camión con los muchachos me dieron ganas de mear. Camino al baño que escucho unos quejidos y como gritos ahogados, el sonido me llevó a un salón cerrado donde estaba una de las maestras abierta de patas sobre el escritorio y en medio de ellas el Fermín acomodándole la reata en la pucha. Era una maestra joven recién contratada, la tenía con las ropas rasgadas y ...
... ella luchaba por zafarse del puto viejo, otra vez no podía remediar la situación, ni yo ni mi familia viviremos tranquilos con ese cabrón vivo—
—A la bestia, no mames pero cómo puede estar ese hijo de su perra madre vivo todavía, ya le tocará su merecido y nada de tonteras del infierno, lo recibirá en vida de eso estoy seguro. Pero mira gracias por avisarme compadre, voy a cuidar a mi esposa, suerte que tuve puro niño con ella, sino ahorita estaría vuelto loco—
—Ándale, cualquier cosa aqui ando manito, nos echamos aguas entre ambos—
Yo estaba anonadada por lo que oía, en donde nos habíamos venido a meter y con quién, teníamos que salir pronto de aquí. Tenía que encontrar rápido a mi madre y contarle todo lo que escuché, ahora entendía porque eran tan permisivas las mujeres con ese pinche viejo, era un criminal y un ultrajador. Regresé de inmediato al edificio atenta por si veía a Fermín para evitarlo a toda costa. No lo vi en su cuartucho y fui rauda hasta mi departamento. Abrí y para mi mala suerte no la encontraba por ninguna parte, ya muy angustiada le marqué pero no respondía. Fui a su recamara en busca de alguna pista sobre su paradero, dejé la puerta entornada y buscaba alguna nota en su calendario cuando escucho que abren la puerta.
Asumí que era ella así que estaba por abrir la puerta cuando escuche que no venía sola:
—Que bonito arreglaste tu depa nalgona, pero lo único que me importa es ver qué cama vamos a usar, llegó la hora de dar tu enganche de la ...