Nudista con suerte, inseminación al natural - Relatos Eróticos

Nudista con suerte, inseminación al natural

... era fuerte, radiante, sin embargo, por ser un día entre semana laboral, la playa estaba algo vacía; cabe aclarar que, para ingresar a la zona nudista de esa playa primero hay que recorrer la playa “normal”, donde no hay familias o personas nudistas. Camine y camine, recorrí la orilla de la playa, en realidad, se me hizo muy largo; cuando por fin, llegué a un montón de rocas altas, que entre ellas formaban una pequeña abertura, como túnel, donde se notaba que la playa continuaba; un rótulo se dejaba leer “Zona Nudista” y dibujos de trajes de baño tachados con una equis roja grande. Atravesé el pequeño túnel de piedra y fue como que me introduje al paraíso, ya estaba en mi zona de confort, las pocas personas que había dejaban ver sus cuerpos a como Dios los trabajo al mundo, veía personas solas, parejas, familias completas y todas desnudas; la playa se volvió mas hermosa y el sol no dejaban de brillar. En seguida, me desvestí en un 2 por 3 y quedé a como Dios me trajo al mundo, caminé un poco más y encontré un lugar hermoso donde tender la toalla para tirarme sobre la arena y colocarme el bloqueador y el bronceador.

Tenía como 30 minutos de estarme bronceando cuando decidí meterme al mar, el agua estaba sabrosa. Estando dentro del mar, noté que había una mujer como de unos 38 años, morena, hermosa, unas tetas redondas con unos pezones mas oscuros y un culo de ensueño, junto a la mujer, había otra mucho mas joven, le calculaba unos 18 años, delgada, igual de morena, las ...

... tetas eran igual a la de la madre, también culazo y totalmente depilada. Ellas iban caminando cerca de donde estaban mis cosas sobre la toalla, miraban mis cosas y me miraban a mi que estaba dentro del mar mientras al mismo tiempo se hablaban. Tuve temor de que fueran ladronas lugareñas y que se aprovechaban de los turistas por lo que salí rápido del mar y corrí hasta donde estaban mis cosas, les dije “buenas tardes, hace mucho calor” mientras me tiraba sobre mi toalla. Ambas mujeres me respondieron el saludo y la mujer mayor se dirige a mi y me dice “disculpa, ella es mi hija y desde hace rato lo estamos observando y creemos que usted es la persona ideal para que nos ayude en una situación”, dentro de mi pensaba de que estas eran, a parte de ladronas, alguna especie de estafadoras o algo parecido. Continuando con la plática, le dije que fueran al grano, que estaba a punto de marcharme y que tenía unas diligencias que hacer mas tarde.

Entre la conversación, los tres desnudos tirados en la toalla, la mujer me dice, totalmente al grano, que el padre de la mujer, es decir, el abuelo de la joven les había dejado una herencia, el señor era millonario, dueño de varios negocios y un hotel de la zona pero que este había fallecido, dentro del testamento había una cláusula especial donde indicaba que la joven heredaría toda su fortuna SOLO SI TENÍA UN HIJO. La mujer junto con su hija, me hacían cara de ruego y se justificaban de que al verme, les gustaría que el niño o niña tuvieran mis ...