¡VOLVER A LOS 17! 5
Fecha: 15/03/2025,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... siempre estoy contento…, usted es muy buena y dulce… - Lo decía con toda sinceridad, aunque no la tocara, solamente ver el tamaño y la forma de su culo me entusiasma, como el tamaño y forma de las tetas…, ¡su escote…!, los muslos…, en fin, toda ella.
-¿Con mi nena cuándo te encontrás?
-Espero que luego, esta tarde…
-Vení a casa entonces…
-¿A su casa?
-Claro. ¿Por qué van andar atorrando por allí, si en casa estarán cómodos? ¡Yo no voy a molestar! Para nada, te dije que me pone contenta que Kirky y vos estén juntos…, muuuuy… juntos… ¡Jajaja! ¡Me gustaría verlos haciendo… cositas…
-Gracias señora… Martina… ¡Es usted tan buena!
-¡Amorcito! ¡Ustedes dos son buenísimos! Kirky me dice que la tratás con tanto cariño, con tanta dulzura, que la llenás de besos y caricias…, bueno… ¡Jajaja! además de llenarla de otras cositas… Ella me cuenta…, ¡somos muy amigas con mi nena! – Martina no dejaba de acariciarme las mejillas, la cabeza…, y la espalda… - Me cuenta todos los besos y… lamidas que le hacés en su cosita… ¡Le gusta mucho! ¡Jajaja! ¿Sabés? ¡A mi también me gusta mucho si un varoncito como vos, me hace eso… ¿Te gustaría?
-¡Si, claro! – Otra vez me temblaban las piernas, pero no de miedo, sino de ansiedad. ¡Ya mismo quisiera chuparle la concha a Martina…
-Amorcito, Dani divino. – Se inclinó y me beso suavemente en los labios. – En ...
... cuanto Kirky tenga algo que hacer con alguna compañerita de la escuela, si puedo te aviso… ¡No dejés de venir!
-¡Por supuesto que iré señora…!
-¡Para vos soy Martina! ¡Te lo dije! Por lo menos cuando estamos solos… - Volvió a besarme. Tengo que reconocer que me portaba como un pelotudo… ¡Tendría que agarrarla por el culo y chuparla toda!
Al día siguiente, aun antes de haber estado con Kirky a solas, ésta me avisó que la mamá me quería ver. Me dijo inquieta y confundida: “no la hagás enojar si te protesta por algo”.
-No mi amor, por supuesto. – Estaba seguro que serían “buenas noticias”.
Fui tal cual lo acordado. Martina me esperaba…
-¡Sabía qué no me fallarías!
-¡Jamás dejaría de ir donde me llama! – Absoluta verdad.
-Vení bebé, no perdamos tiempo… - Me tomó de la mano y me llevó al dormitorio.
La hermosa Martina estaba con una liviana bata semitransparente que permitía insinuar toda la carne que protegía: muslos, caderas, cintura, ombligo, tetas…, a cuál más apetitosa.
-¡Bebé! ¡Qué reacción tan acelerada! – Riendo, sin soltarme, me acarició el bulto, que estaba como carpa. - ¡Me gusta mucho!
¿Yo sería capaz? Hubo oportunidades, en jodas que hacíamos los vagos de los primeros años de la técnica, durante la cual, en el curso de dos o tres horas nos cogíamos a cuatro o cinco chicas… Pero… ¿una súper mina como esta? ¿Será posible?