1. Secreto a cuatro voces 3: Los dos hoteles


    Fecha: 24/12/2018, Categorías: Primera Vez Autor: Sirena y Triton, Fuente: CuentoRelatos

    ... que me llames”.
    
    Tamy se rió y le comentó: “Tengo ganas de secuestrarte más tarde y no quiero que me digas que no”.
    
    Roberto se terminó de ruborizar, se reía nerviosamente, pero le dijo sin reparo: “Claro. ¿Cómo hacemos para el secuestro?.
    
    Tamy con tono firme y seductor le dijo: “Pasa por mí a la oficina, me llevas a cambiarme y luego nos vamos al Hotel.” “Hoy me gustaría ir al Hotel Las Montañas… ¿te parece?”. “Esta vez vamos a estar los dos solos… espero que eso implique que haremos cosas diferentes y muy calientes”.
    
    Roberto bastante extrañado por lo que estaba oyendo, pero con la excitación galopando su mente, dijo: “Dime la hora y te paso recogiendo”.
    
    Y Tamy sin perder un segundo dijo: “A las 5 en punto te espero”.
    
    Ambos se despidieron y colgaron sus teléfonos.
    
    Ya eran como las 4:30, cuando César recibió dos nuevos mensajes de Carolina: “Listo… ya estoy lista… hab. 815.. te espero”. “Ya avisé en la Recepción que esperaba compañía… no te tardes… dejé la llave debajo de la alfombra de la entrada”. César que ya había despachado a los últimos clientes de ese día y ya estaba recogiendo las cosas en su casa, se apresuró a armar un pequeño morral y se dirigió al carro. El trayecto se hizo tortuoso por la ansiedad. Pensaba y repensaba en Carolina. En cómo estaría vestida y qué podrían hacer distinto en esta ocasión.
    
    Mientras tanto en la oficina, Tamy, bastante nerviosa, iba repetidamente al baño a verse en el espejo. Repetía en su mente: “Me voy a cambiar ...
    ... en un rato, pero no quiero dar una mala primera impresión. Me gustaría que se excitara al apenas verme”. Tanto entró en el baño que no se dio cuenta que ya eran las 5 pm, y sólo miró su reloj cuando escuchó la corneta de un carro que se estacionaba enfrente del edificio. Salió a la ventana y se dio cuenta que efectivamente era Roberto. Se despidió más rápido que nunca y bajó las escaleras. Antes de salir, se peinó un poco y trato de dar una imagen más calmada. Se dirigió al carro, se subió y saludó a Roberto con un beso en la mejilla. Este arrancó el vehículo y a los pocos metros, sin dejarlo pronunciar palabra, Tamy le dijo que se detuviera. Él profundamente extrañado se detuvo, y ella de un salto lo beso con plena lujuria. Se notaba intensamente su excitación, por como introducía su lengua en la boca de Roberto, la imagen de calma sólo duró unos segundos.
    
    César llegó al Hotel El Patio, pasó frente a la recepción y sólo saludó de lejos, como si tuviera días hospedado. Tomó el ascensor y subió hasta el último piso del edificio. Pensó que si no era el piso indicado, iría bajando por las escaleras y no subiendo por ellas. Apenas se bajó, leyó un aviso con dos flechas que indicaban a la derecha las Habitaciones de la 801 a la 810 y a la izquierda las Habitaciones de la 811 a la 820. Ya aliviado porque había llegado al piso indicado, caminó lo más rápido que pudo, recogió la llave y entró al cuarto. Se oía música en el televisor y en medio de la obscuridad se veía la silueta de ...
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