UN PAR DE MANOS OCUPADAS - Relatos Eróticos

UN PAR DE MANOS OCUPADAS

... boca arriba para ser chupada por Sofi, las tengo unos minutos acostadas con sus piernas de collar, y les chupo y lamo todos los jugos que le quedan, incluso en los muslos y el culo. Luego reanudo el empotramiento, en este caso de Sofi. Así estamos cosa de media hora, meta y ponga, en culo y concha.
Luego estamos unos diez minutos, con las chicas mamando, alternándose en chupar y lamer tronco, glande y testículos, hasta que Sofía se acuesta boca arriba en el borde de la cama para que yo la ensarte, y Lucía se pone en cuatro sobre la boca de su amiga, para ser chupada. Y siguen los orgasmos…
Les pido un momentito de descanso, para que ambas se acuesten boca arriba en el borde de la cama, con las piernas colgando, mientras me dedico a chuparles culo y concha durante varios minutos… Lucía enseguida llega al orgasmo, unos minutos más tarde Sofía tiene el propio. Por supuesto, cada orgasmo es el motivo de nueva chupada de concha, jamones y culo, hasta que quede lo más “prolijo” posible.
Mi pija, entretanto, sigue perfectamente erguida, merecedora de las caricias y lengüetazos de las hembras. Ante cada cambio de postura, se impone una mamadita a mi caluroso y húmedo choto… Todo es risa y gemidos… ¡gracias a la pastillita!
¡Aaahh! Ahora recuerdo… En el pueblo hay una única farmacia, que tiene los productos más necesarios en el uso diario y familiar…, incluso algunos productos que, además de los humanos, pueden ser usados en animales. Dado que, tal como dije, no fui a ese ...

... pueblo con ánimos “turísticos”, me “encontré” con la necesidad de sildenafil, por lo cual traté de adquirirlo en la farmacia… ¡Sorpresa! ¡No hay! Así que estuve un par de días en espera de tan necesario complemento…

Lo mejor de tener dos conchas y dos culos, es que podés tener las dos manos ocupadas…, lo cual verifico sin mayores problemas.
	La única manera de poder relajarme es estar boca arriba, con la pija como mástil. ¡Maravillosas las pastillitas!
Hacia el final, mientras a una se la meto en el culo, la otra me chupa los huevos y el ano. Así en varios cambios, entre regocijo interminable, y yo, apretándome el tronco hasta poder complacer a ambas, que ya andan por cinco o seis orgasmos cada una… No dejo de besar y chupar cada orgasmo, tal es así que ya siento cierta acidez en el estómago por tanto fluido vaginal.
	Sofi, súper canchera, me da una idea que, supongo, debe haber practicado en otra oportunidad: hace poner boca arriba a Luci, y ella se pone en cuatro en la misma orientación. ¡Hay concha de Luci y culo de Sofi para mí! Sale de una y entra en la otra. ¡Una maravilla! 

¡Momento de placer! ¡Uno más! Me arrodillo en la cama y ambas se acuestan entre mis piernas elevando el torso y la cabeza. ¡Boquita abierta y lengüita afuera! Los cinco chicotazos de semen van alternativamente en una u otra, hasta que se besan intercambiando semen, antes de tragar. Todos quedamos plenamente satisfechos, y me acurruco entre ambas a dormir. ¡Qué felicidad!
	Acostado de espaldas ...