Relatos eróticos esposos cómplices cap 183 - Relatos Eróticos

Relatos eróticos esposos cómplices cap 183

... fué el inicio de una nueva vida para los tres. Él venía una vez por semana y de a pocos fué ganando terreno hasta metérselo todo y disfrutar a lo lindo entre los tres, con algunos jueguitos que hicimos.

Yo : Qué jueguitos papá ?

Papá : Yá te lo diré en su momento.

Yo : Si me acuerdo de él. Pero yá estará viejo o muerto.

Papá : No hijita, él tiene mi edad. Si deseas lo busco. Tú qué dices ?

Yo : No hay otra solución papá ?

Papá : No encuentro otra hijita y es la más segura y discreta.

Yo : Pero aún se le pondrá dura ?

Papá : Tiene mi edad y así como a mí, a él también se le pondrá dura. La cosa es saber si lo aguantaras.

Yo : Papá, tengo tantas ganas que de seguro que si lo aguanto. Entonces habla con el yo vengo la otra semana.

Papá : Te gustó lo que te hice ?

Yo : Papá me has sacado dos orgasmos, con éso te digo todo.

Mi papá después me contó que lo fue a buscar a su amigo Teo que no lo veía hace años.

Papá : Teo , no sabía que habías abrazado la biblia.

Teo : Amigo, hay tantos pecados que uno lleva que necesita encontrar la paz
Dime, a qué se debe tu visita.

Papá : Te acuerdas que me ayudaste con mi señora en ésos momentos íntimos y difíciles ?

Teo : Claro que sí. Al menos la hice feliz antes de partir.

Papá : Y te lo agradezco, sólo que ahora tengo un problema igual.

Teo : Amigo qué felicidad yá conseguiste pareja. Pero mírame yá soy pastor, ya no te puedo ayudar.

Papa : Pero los pastores ayudan al prójimo y ella ...

... necesita de tu ayuda y yo te lo pido de corazón.

Teo :; Debe ser alguien que quieres mucho, para pedírmelo así.

Papá : Es por mi hija que hablo.

Miró al cielo tratando de recordar.

Teo : Es la enana bonita que me fastidiaba en la mesa.

Papá : Ella misma. Su marido sufre de lo mismo que yo y no logra ser feliz.

Teo : por qué no se divorcia ?

Papá : Es por su hijita y por qué se quieren los dos.

Teo : Disculpa, pero por qué su marido no resuelve su problema ?

Papá : Será por qué no tiene un amigo como el mío.

Teo : Le has contado nuestro secreto ?

Papá : Tuve que hacerlo, estaba tan desesperada.

Teo : Le has dicho cómo la tengo.

Papá : Dice que no hay problema.

Teo : Está bien amigo, pero como siempre con mucha discreción mira que soy casado y soy un pastor.

Papá : No te preocupes amigo. Te espero el sábado a las 10 de la mañana en mi casa.

Ésa semana me la pasé inquieta dudando en contarle a mi marido, pero no lo hice, yéndome con mi hija a la casa de mi papá muy ansiosa.

Estacioné y al ingresar estaba mi papá con un viejo flaco y barbudo que no aparentaba ser vergon y era su amigo. Después de saludarnos todo fué silencio teniendo que tomar mi papá la palabra.

Papá : Voy a ser concreto y sincero por el tiempo.

Amigo Teo mi hija Lili no puede encontrar la felicidad con su marido por qué la tiene chica igual que la mía y te pedimos el favor que la ayudes como hiciste con mi esposa.

Teo : Lili, tu marido sabe lo que has ...