Relatos eróticos esposos cómplices cap 183 - Relatos Eróticos

Relatos eróticos esposos cómplices cap 183

... venido a hacer ?

Yo : No señor.

Teo : Yo te hago el favor siempre y cuando me prometas que después se lo contarás.

Yo : Se lo prometo señor.

Papá : Entonces vayan a mi cuarto que yo me quedo con la niña.

Yo : Déjala sola por qué con los juguetes que le he traído se entretiene más bien acompáñame a mi.

Estando los tres en el cuarto.

Teo : Me permites que te acaricié y te bese para incentivarme.

Miré a mi papá y moviendo la cabeza.

Yo : Está bien señor, pero hágamelo bien para irme feliz.

Teo me abrazó y me besó dándome algo de asco que no mostré por respeto.

Luego me quito la ropa con sus manos temblorosas haciéndome dudar de su fama. Besó todo mi cuerpo y aguanté para ver hasta donde llegaba.

Después se quitó la camisa mostrando hueso y pellejo que me desánimo de seguir mirando, pero cuando se bajó el pantalón saltó una verga enorme llena de venas, larga, gruesa, con una cabeza ancha y dos huevos gordos colgando unos 20 centímetros abajo.

Mi primera impresión fué que lo estaba imaginando y la otra fué, que era un monstruo que me vá a matar.

Me acerqué rápidamente y lo pese con mi mano, calculando 2 kilos, luego lo apreté con todas mis fuerzas viendo engrosar sus venas.

Me agaché metiendo su cabeza en mi boca, mientras que con mis manos le acariciaba el tronco y los huevos.

Me sentía en el paraíso. Luego me paré y dándole un beso en la boca lo llevé de la verga a la cama.

Me eché y abriendo mis piernas sentí su lengua ...

... experimentada entrar y sacar mis jugos.

Teo : Amigo, ven prueba lo rico que está. Ven.

Mi papá me miró y asentando con la cabeza también metió su lengua haciéndome sentir más rico que su amigo Teo.

Luego me voltearon haciendo lo mismo y certifique que mi papá era mejor que su amigo con la lengua.

Al chuparme las tetas demostró lo mismo, sintiéndome orgullosa de él, mirándolo le dí el primer beso en su boca, quedándo los dos extasiados.

Al ponerme en posición de misionero se tendió encima mío, colocando la punta en mi entrada preguntando.

Teo : Lo quieres lento o rápido ?

Yo : Rápido de preferencia.

Papá : Pero no me la dañes, todavía está chiquita.

Yo : Jajaja jajaja Papá, no digas éso.

Teo : Amigo, cuando se coma todo ésto yá no la verás tan chiquita.

Empujó por 3 veces consecutivas sin lograr meterlo y yo aguantaba mi grito con un cojín.

En el 4to empujón metió la cabeza sintiéndome morir, pero a éso vine, así que aguanté otro empujón sintiendo la tercera parte de la verga, también sentía desmayarme con mis ojos con lágrimas, mis venas saltadas y mi rostro rojo...

Teo : Eres muy valiente, pero creo que nos podemos dar gusto así como estamos. No vaya a ser que te reviente. La otra semana avanzamos algo más.

Papá : Es mejor. Dense gusto con lo que hay.

Teo comenzó a moverme como nunca lo habían hecho, viniéndome uno, dos,tres hasta 6 veces antes de qué me llene con una gran cantidad de leche, luego se durmió tendido encima mío.

Fueron ...