EL COMIENZO DEL PRINCIPIO - Relatos Eróticos

EL COMIENZO DEL PRINCIPIO

... mina!
-¡Mirá Dani! ¡Lo qué encontré! – Miriam aparentaba entusiasmo, no escandalizada… ¿Sabría de qué se trata?
¡Lo sabía!
-¡Jajaja! ¡Están como se ponen papá y mamá cuando juegan creyendo que yo estoy dormida! - ¡Cagamos! ¡Sabe de qué se trata! ¡Y tengo un montón! – ¡Casi todas las noches hacen eso! ¡Me gusta espiarlos! ¡Jajaja!
Es muy divertido para Miriam… Se levantó de la cama y se paró a mi lado. Yo estaba en el taburete que me permitía dibujar con comodidad.
-¿Me alzás? Quiero que me tengas upa… - En una mano la revista; la otra en mi pierna, pidiendo que la suba.
	La tomé de las axilas y la puse sobre mi falda. Miriam se acomodó de manera que su culito quedara bien posicionado en el centro de mi entrepierna. Me daba la espalda. 
-¿Viste cuantas fotos de chicos jugando como mamá y papá? – Tiene la revista abierta en la página central y la foto es espectacular… - ¿A vos te gusta jugar así? ¿Tenés alguna amiga que juega con vos?
-No, no tengo a nadie… - ¿Y qué le iba a decir? ¿Para qué me empiece a preguntar qué es lo que hago? – Estos son más grandes…
-No me parece que sean más grande que vos… - Si, lo eran, sin dudas… ¿Qué pretende?
Miriam comienza a mover el culito sobre mis piernas…
-¿Sabés Dani? A mí me gustaría jugar así con vos… - ¡Cagamos! ¿Ahora qué hago? – Mirá, en esta foto el chico le pasa la lengua en la cosita…, como hace mi papá. ¿Te gustaría pasarme la lengüita por mi cosita? 
-Es que…, Miriam…, sos muy chiquita…
-¡Pero tengo muchas ganas! ...

... ¡Dale! ¡Dale! ¡Dame besitos en la cosita! – Tomándose de la mesa de dibujo, Miriam se da vuelta y queda frente a mí. No necesita estirar el cuello para besarme en la boca, - ¡Se buenito! ¡Tengo muchas ganitas!
¡Ya la tengo al palo! ¡La nena es un incendio!
-Sentame en el tablero… - Es lo que hago. No me voy a negar. ¡Me atrapó! ¡Mi pija no quiere otra cosa! La siento en la mesa de dibujo y…, ¡antes que diga ni haga nada, ella se saca la bombachita! - ¡Así me podés besar mejor!
Y claro, a eso voy. Pongo sus piernitas sobre mis hombros y meto mi cabeza entre ellas. ¡Tengo que reconocer que nunca había saboreado algo tan exquisito!
-¡Ay Dani! ¡Me hago pis! – Yo sabía que eso es lo que entienden por orgasmo las nenas.
-¡No importa! ¡Me lo trago! – Y apreté mi boca contra su conchita sorbiendo todo el fluido que Miriam generaba… ¡un montón! - ¡Es riquísimo, mi amor!
Mi intención, a esta altura, es que esto sea el comienzo de una relación más intensa…, cada vez más intensa… No olvidar que acabo de ingresar al secundario.
-¡Dani! ¡Dani! ¡Qué rico! – Miriam se aprieta contra mi boca. Me acaricia la cabeza, me tira del cabello… - Mi cosita tiembla…, ¡estoy hirviendo!
Es el momento de avanzar. Probablemente, si estuviera más calmado, no haría lo que hice…, ¡Miriam es un incendio!
Me abrí la bragueta y extraje la pija. Miriam estaba acostada sobre el tablero. La senté y le hice ver lo que tengo entre las piernas…
-¡Ay papito, qué lindoooo!
-¿De dónde sacaste eso de “papito”? ...