Relatos eróticos esposos cómplices cap 187 - Relatos Eróticos

Relatos eróticos esposos cómplices cap 187

... hemos terminado tarde por qué aún yo no tengo la experiencia pero cuando la tenga saldré a mi hora.

Cansado llegué a mi casa siendo felicitado por mi familia hablando de proyectos con mi sueldo. Yo sólo reí, comí yéndome a descansar.

Los demás días de la semana fueron iguales a excepción del viernes que me invitó a jugar un partido de fútbol en un estadio con sus clientes, vecinos y amigos.
Terminando todos nos fuimos a bañar y luego tomar unas cervezas como despedida hasta la próxima semana.

Siguieron así las cosas hasta la quincena y fin de mes que me pagó mi sueldo.
De acuerdo con mi papá quedamos en comprarme ropa para estar mejor vestido para el trabajo y para salir. También comimos en la calle con mi familia dándoles su propina a mis hermanos y a mis papás, sintiéndome orgulloso. Así serían los 3 primeros meses.

Seguí trabajando y sociabilisando de forma normal, hasta que llegó un día en qué nos quedamos sólos en la cancha, tomando unas cervezas demás con el señor y estando algo mareado.

Señor : Toño, yá has tenido relaciones sexuales ?

Entre mi embriaguez me quedé sorprendido de la pregunta.

Yo : Todavía no señor.

Señor : Tienes que tener cuidado con quién lo haces, por qué tienes una verga grande y a una niña le puedes hacer daño.

Éso yo yá lo sabía desde el colegio, pero pensé que no sería más grande que la de un adulto.

Yo : Es qué no he pensado en éso por qué no tengo a nadie en mente.

El señor se quedó callado por un momento ...

... hasta que tomando valor.

Señor : Toño, yá tengo 50 años, 25 años de casado con dos hijos que viven en el extranjero y yo estoy sólo con mi mujer haciendo lo mismo que hemos hecho tantos años.
Discúlpame lo que te voy a confesar : No soy homosexual pero al verte desnudo, me provocó tener todo éso dentro mío. Creés que puedes comenzar conmigo y yo contigo  ?

Con ésta confesión se me quitó la borrachera. El señor quería que me lo cache. Pero no me apetecía y si le decía NO me podía despedir.

Yo : Señor, discúlpeme pero yo aún no he pensado en iniciarme.

Señor : Pero cuando lo decidas pensarás en mi ?

Yo : Señor, discúlpeme pero en mi cabeza no está un hombre si no una mujer.

Señor : Qué pena. Hubiera sido un buen inicio. Entonces te seguirás haciendo la paja ?

Yo : Sí señor.

Señor : Me dejarías que te haga la paja ?

Me sentí acorralado pensando que si le volvía a decir NO me despediría y a mí me gusta mi trabajo y mi buen sueldo.

Yo : Éso si puede hacer señor.

Señor : Gracias Toño. Vamos a ése lado que está más oscuro.

Me llevó a un lado bien desolado y desesperado sacó mi verga que estaba dura por la conversación y mirándola con un deseo casi anormal, lo tomó fuerte con sus manos, logrando ver hinchadas mis venas y la cabeza, pasando su lengua por todos lados, metiendo mis huevos a su boca uno por uno jugando con ellos y luego metió la cabeza en su boca succionando fuerte, que yo yá no pude resistirme y caí en la excitación, empezando a moverme ...