HERMOSAS PAREJAS - Relatos Eróticos

HERMOSAS PAREJAS

... nosotras más! - ¡Y ambas se vinieron encima, abrasar, besar…, y toquetear…, con gran placer de mi parte!
No pude hacer otra cosa que agarrarle un glúteo a cada una. Me empujaron más adentro, hacia las habitaciones.
-Ay Dani… ¡qué ganas tenemos! – Ya estábamos en el dormitorio. En verdad la cama es muy amplia. ¡Cabemos cómodos! 
Elena me saca la camisa. Amalia me baja los pantalones, con bóxer y todo. Inmediatamente Elena se arrodilla a mamar, mientras Amalia me saca los borsegos y los pantalones. Estoy desnudo y las nenas todavía vestidas… ¡No puede ser! 
Las chicas no son de dudar. En cuanto estoy desnudo, además de acariciarme y besarme, se van sacando mutuamente la ropa…, mientras una chupa y la otra retira las prendas, alternándose en la “tarea”.
Amalia, la mayor, toda una mujer completa, de 17-18 años, con una ajustada camisa y una pequeña pollerita, cortona… Es una belleza total, de inmensos ojos verdes y largas pestañas, con una sonrisa…, bueeeee…, de esas que invitan a “entrar…”, entrar por todas partes…, en todos los agujeros… Perfectamente proporcionada, tetas, cintura, caderas y nalgas en las medidas exactas…, absolutamente expuestas para gozar…
Y la nena…, Elena, bueno…, no me cabe la menor duda que esperaba y deseaba más que su hermana mayor, recibir todo lo necesario para ser una mujer… Una coqueta sonrisa, preguntando cuanto tendrá que esperar para que la hermana le haga el lugar correspondiente para disfrutar como ella. Un hermoso y armonioso cuerpo de ...

... púber en pleno desarrollo. No es casual que no luzca corpiño, dado que los duros y parados pezones se lucen plenamente, así como la pancita, descubierta por la cortísima blusita, y baja cintura de la pollerita. El culito, tan hermoso como es de esperar y un largo y negro cabello, para revolver cuando la tenés clavada en cuatro… No le hace falta nada más para volver un fierro la pija de cualquier tipo sano que la vea. ¡Soy uno de esos! 
Reconozco sin vergüenza que mis descripciones de las pre púber son mucho más “detalladas” que las de las jóvenes… ¡Es así nomás! Las dos últimas localizaciones de mis trabajos, despertaron mi “atención” en esas criaturas…
Y…, bueno…, sus actitudes enriquecen mi opinión…: las hermanitas se complementan en las franelas y mamadas…: pija, bolas, torso, cuello…, todo mi cuerpo a disposición de las hembritas…
Como tantas otras veces, acostado boca arriba, bien al palo, es un aliciente para las niñas calentonas… 
Amalia tomó la iniciativa. La menor respetó su decisión…, aunque, por supuesto, tuvo su compensación.
No parecen tener demasiada experiencia. Hice a Amalia colocarse a caballito sobre mí, y le indiqué que tomara la pija y colocara la cabeza entre los labios de la concha. Ella me miraba, sonriente, sorprendida y agradecida. Le dije que podía “sentarse” poquito a poco. Así la fui penetrando. Amalia tiene los ojos en blanco, mordiéndose los labios…, hasta que quedó totalmente sentada sobre mi pubis…, y la pija enterrada hasta el útero… ¡Allí ...