¿QUÉ HAY EN EL VOLGA?
Fecha: 05/07/2025,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Hacía bastante que había dejado de ser el novato de la empresa, por lo cual, más allá de mis intenciones, no volví a ser “obligado” a recorrer aburridas poblaciones del interior, pues mi presencia es importante para las grandes obras urbanas…, así que me quedé “sin el pan y sin la torta”: no más incentivo por traslados, ni complacientes destinos. De estos, habían pasado ocho años…, así que no hubo otra posibilidad: dedicación exclusiva al trabajo y la familia…, y punto.
Pero…, como casi siempre, hay un pero… Buscando un antiguo libro de análisis matemático alemán –al fin de cuentas las matemáticas son iguales en cualquier idioma-, en una librería de viejos…, tropecé –literalmente así, “tropecé”-, dado que me llevé por delante, a una exquisita representante del sexo femenino… ¡sin la menor duda!
Una rubia señora, de verdes e inmensos ojos, largas y curvadas pestañas, golosos y húmedos labios, altos pómulos…, y… hacia abajo…, todo lo que te puedas imaginar…, pues el amplio tapado que calzaba sólo permite utilizar sueños eróticos…, dado que su sonrisa –cuando la empujé sin querer-, me hizo erotizar hasta el cabello, sintiendo como mi pantalón impedía la libre expresión de mis deseos…
-¡Pe…perdón señora! ¡Discúlpeme por favor! ¡Estaba demasiado interesado en estos libros! – Absolutamente cierto…, sin piedad… ¡Estúpido de mí! ¡Cómo puedo ser tan boludo y no apreciar semejante mina!
-Ningún problema caballero… Se nota que le interesa la cultura alemana… - Su voz sale de un ...
... crespón de terciopelo…
-Señora…, por favor…, disculpe mi torpeza… - Realmente estaba estúpido. ¡Cómo me voy a llevar por delante a semejante “dama…”! ¡Totalmente, sin exageración…!
-No hay ningún problema…, le aseguro, para nada…, sin tener la favorable impresión de que le interesa la cultura alemana…
Yo le iba a decir que, en realidad, la matemática es igual en cualquier idioma…, pero… si está complacida por mi acercamiento a SU cultura –no me quedan dudas de su origen-, no la voy a defraudar…
-Y…, si señora., pero no es justificativo para empujarla…
-¡Jajaja! ¡Para nada! ¡No lo justifico…, y no lo “castigo…” ¡Jajaja! Me alegro de su interés…, lo acerca al mío… - ¡Carajo! Pavada de “arrimón”.
-¡Señora! Agradezco su comprensión… - ¿Es el momento? ¿O pura sanata? – Debo borrar mi torpeza… ¿Acepta mi invitación a una copa?
-¡Qué audaz! ¡Me encanta! ¡Acepto! - ¡BINGO! Al lado, bajo la recova, hay un barcito. Ninguna indicación y ambos estábamos sentados a una mesita cinco segundos más tarde…
-Bueno, en verdad me interesa la cultura alemana… ¿A usted también?
-¿Qué le puedo decir? Es mi lengua materna…, no porque nací allí…, sino porque lo habla mi madre… Aprendí ese idioma antes que el nuestro…
Hace calor. Estamos sentados al cubierto del sol, bajo la recova, gozando de una cerveza, pues eso aceptó la dama…
Hablamos del idioma y le confesé que salvo “schön“ (hermosa o algo así) no sabía otra cosa…
-¡Jaja! Eso le permite quedar muy bien…
-“Quedar muy bien“ es cuando se ...