Los Amigos del tanque - Relatos Eróticos

Los Amigos del tanque

... nuestras cosas para evitar robos y nosotros entraríamos por el baño de las niñas, debido a que la conserje siempre deja abierta esa puerta y a su vez la parte de los tanques.

Al entrar dejamos nuestras mochilas en el suelo, los tres nos quitamos la ropa, yo fui el que más apeno de nuestra desnudes, Roy me pidió ponerme en cuatro como en la vez anterior, Esteban abrió mis nalgas y comenzó a darme un beso negro, la sensación fue muy placentera podía sentir como su lengua llenaba una porción de mi interior, hubiera querido que me llenará más, iba soltando algunos gemidos débiles, Roy solo se quedaba viendo este show con su verga en la mano, para luego meterme su polla en mi boca.

Comencé chupando el glande de mi amigo, pasando mi lengua de arriba a abajo, seguí bajando por su tronco y sin darme cuenta estaba haciendo una garganta semi completa, mientras que Esteban había sacado una botella de lubricante, se untó en uno de sus dedos, para meterlo a mi portal mientras masajeaba mi ano con esa sustancia viscosa y resbaladiza, seguía teniendo sexo oral con Roy.

Note cuando saco su polla de mi boca para penetrarme con ella, sin embargo quería en la posición del misionero accedí, sin antes recomendé que pongamos nuestros uniformes como si fueran sábanas debido a que el suelo estaba muy frío, cuando los terminamos de colocar me recosté boca arriba, abriendo mis piernas, cuando se colocó cerca de mi entrada, mis muslos reposaron sobre sus nalgas y comenzó la diversión donde ...

... al principio me molestó, ambos chicos me pidieron que tratará de relajarme, respirando al mismo ritmo que metía su verga dentro de mí, en pocos minutos salían mis primeros gemidos de placer, Esteban no perdió el tiempo e hizo que se la mamara con el mismo ritmo en el que yo era penetrado, cuando se sintió satisfecho le dijo a Rogelio: — quiero romperle el culo.

Me pidió que me inclinara, abrió mis nalgas para luego meterme su polla está ocasión sentí que entro de manera más profunda, su ritmo era meterla lentamente y luego sacarla casi por completo para reintroducirla, me dio unas nalgadas mientras seguía pidiendo por entrecortado por mis gemidos se movía de una manera en la cual hizo más placentera la sensación mientras decía: ¡Qué rico es tener otro culito! Es cuando Roy quiso que le volviera a dar culito, Esteban hizo que me comiera su ano y le masturbe su verga, mis gemidos se convirtieron en lengüetadas tanto que lo hice gemir como una patita mientras entre estos Roy confesó: — la verdad es que te vimos cuando... [gemido] Nos espiaste dándole verga a Memo... Pero nos gustó esa experiencia de voyerismo.
Eduardo — la verdad nadie... Más nos hubiera... Aceptado esto... Pero la mamas increíble... ¡Chicos creo que me voy a correr!. Yo le pedí que me diera su corrida en la boca, pero Roy también dijo: — ¡Igual voy a correrme!. ¡Córrete en mi cariño!. Rogelio se corrió en mi ano y Esteban en mi boca cuando sucedió eso tuve un multiorgasmo que grite tan tito y yo también me ...