El distribuidor de extintores
Fecha: 06/01/2019,
Categorías:
Gays
Autor: Martz Santo, Fuente: CuentoRelatos
... tanto?
—Perdón... no yo no te sigo... es que... bueno si, tú me atraes mucho y me gustas pero yo no te he molestado o sí?
—No, claro que no, has sido siempre muy amable conmigo.
—Y cómo te diste cuenta? Acaso se me nota mucho?
—No, yo ni siquiera me había fijado pero los demás sí, para ellos tus atenciones para conmigo eran muy notorias, ellos me advirtieron de tu interés en mi.
—En serio? es bueno saberlo para cambiar y tenerlo en cuenta.
—Y cuál es tu intención para conmigo o sea que es lo que buscas de mí?
— La verdad, no lo sé, es algo que se fue dando poco a poco, yo no tengo idea de lo que busco pero solo me pareció muy interesante conocerte y platicar contigo para convivir y ser tu amigo, eso es todo por ahora, ni siquiera he pensado en lo sexual aunque debo confesar que me gustas mucho, espero que no te ofendas.
— Para nada, tú has sido muy respetuoso y yo solo deseaba aclarar cualquier duda al respecto y no me pareció muy raro que seas amable conmigo, yo solo tengo una pregunta que hacer y espero que seas sincero al responder;
— Sí, claro que sí pregunta
— Te atraigo sexualmente y eso es lo que buscas conmigo?
— Ya te dije que sí me gustas y mucho, y en cuanto al sexo, cuando estoy contigo mis emociones se alteran muchísimo, me he imaginado besándote y compartiendo mi cuerpo contigo, sintiendo como me abrazas y me penetras en muchas ocasiones muy rico y me haces sentir toda clase de sensaciones.
— Y por qué te parece que yo ...
... podría interesarme en hacerlo contigo si apenas me conoces?
— Ese precisamente es el problema que yo no sé si tú estés interesado en algo así, tú eres muy serio y responsable de eso me he dado cuenta y me gusta tu forma de ser, por eso me siento atraído por ti, pero yo no quiero hacerlo nunca si eso te causa algún problema en tu casa o tu trabajo, por eso no te había dicho nada, solo me conformaba con verte y estar cerca de ti.
Me quedé callado pensando en mi familia, amo a mi esposa pero por causas ajenas a nosotros no tenemos mucho tiempo para el sexo, además ha estado enferma y ya es mucho tiempo sin hablar de esto con ella y pues uno tiene sus necesidades y pues ya ni me acuerdo cuando fue la última vez que lo hicimos.
Gonzalo al verme tan pensativo y como me quedé callado me preguntó;
— Y tu qué piensas de mí al menos te agrado un poco o te soy indiferente?
— Quieres que te diga la verdad?
— Pues claro, se sincero no te preocupes por eso.
— Pues yo he tenido una gran cantidad de personas a mi alrededor y nunca me había dado cuenta que estoy muy solo hasta que llegaste tú, con nadie había hecho amistad tanto como contigo y a veces te veía tu trasero y la verdad se me paraba mi miembro, pero nunca pensé en tener algo más porque me gusta respetar a las personas.
El me respondió;
Sí, a veces yo te veía empalmado y me preguntaba, "será que le gustan mis nalgas" y comenzaba a fantasear, pero como nunca dijiste nada me sentía desilusionado y me ponía en ...