1. Ana 6: desencadenada (Parte 2)


    Fecha: 07/01/2019, Categorías: Transexuales Autor: Gabriel B, Fuente: CuentoRelatos

    ... apática, mientras la penetraban.
    
    Los chantajistas no hicieron nada novedoso. Primero Juan se la cogió tal como estaba ella dispuesta sobre la cama. Le dio cierta repulsión notar como aquel joven rubio y alto, se excitaba aún más al observar el gesto carente de deseo de ella. Y luego siguió lo mismo de siempre. Embestidas violentas con ella en cuatro. Eyaculaciones sobre su cara, cachetazos en el culo, insultos humillantes, gemidos imposibles de reprimir… los despidió sin levantarse de la cama, con un beso en la mejilla, como si fueran compañeros de trabajo, que se despedían hasta la próxima jornada laboral.
    
    Estaba harta de los hombres. Ya se vengaría de esos pendejos, pero mientras tanto se desquitaría con el santurrón de Federico. Se encargaría de hacer tambalear la vida pacífica que tenía con la pelotuda de su esposa.
    
    Pero también estaba el cadete, Ramiro. Ya había pasado una semana de que hizo el pedido así que Ana hace nuevamente un encargo para llenar la heladera, y la alacena. Y obviamente, para calentarle la pija a Ramiro.
    
    Se pregunta cómo hacer para asegurarse de que sea él quien le entregue el pedido. La página del supermercado no contemplaba la posibilidad de que el cliente prefiera a determinado repartidor, y en todo caso, eso sería exponerse demasiado. Así que simplemente hace el pedido esperando tener suerte.
    
    Se vistió exageradamente elegante y sexy. Con una ceñida minifalda color crema, y una blusa blanca con escote pronunciado. Se puso la ...
    ... bijouterie que solo usaba para ir a lugares elegantes. Un par de aros grandes decoraban su cara, mientras un collar de perlas colgaba encima de sus tetas, y un reloj dorado adornaba su delicada muñeca.
    
    Sonó el timbre. Abrió la puerta y se encontró con un ramiro que la observaba estupefacto, con los ojos desmesuradamente abiertos. Si estando vestida descuidadamente le pareció atractiva, ahora se sentía ante la presencia de un ángel.
    
    —Hola. Pasá. — lo invitó. — ¿Cómo estás?
    
    —Bien ¿vos? — dijo él mientras avanzaba con el carrito que llevaba la mercadería, en dirección a la cocina. — se ve que te vas a alguna fiesta.
    
    —A la inauguración de un local de Palermo. — Miente ella. — tengo que ir bien vestida ¿Cómo estoy? — le pregunta, y hace un giro de noventa grados, como una modelo en la pasarela.
    
    Ramiro se la come con los ojos. No puede creer que exista tanta belleza en un solo ser. Ana tiene un rostro blanco, impecable, nariz y orejas pequeñas. Sus rizos rubios están sueltos sobre el hombro. Siempre sonríe seductoramente, su trasero está bien parado, sus pechos, grandes, en ese diminuto cuerpo, sus piernas, perfectas sobre los tacos.
    
    —Estás perfecta. — le responde mientras va colocando las bolsas sobre la mesada.
    
    —Gracias, que caballero. — esta vez no le pregunta si le apetece coca fría, sino que va directo a la heladera y se la sirve en un vaso. — ¿hace cuánto que trabajás en el super? — le pregunta, entregándole el vaso.
    
    —Hace un mes. Estoy a prueba.
    
    —Bueno, ...