1. Violada por una mujer


    Fecha: 25/01/2019, Categorías: Intercambios Autor: MissFlorMayo, Fuente: CuentoRelatos

    ... conversación Susana se había puesto más cachonda de lo que ya estaba y la idea soez que había tenido, cobró vida de nuevo y ya no podía pensar en nada más que llevarla a cabo.
    
    Pasaron los días y la calentura de Susana no remitía y llegó el momento apropiado para realizar su fantasía. Era sábado de madrugada, aún estaba oscuro en esa fría noche de invierno y ella estaba cerrando el bar, le acompañaba su mejor amiga. Estaba muy cansada y muy cachonda y la oportunidad de oro llegó. Susana, que le había contado a su amiga Patricia, su fantasía, se miraron a los ojos cuando a lo lejos se dieron cuenta de que venía Mireya, aparentemente un poco contenta, bajando la avenida. Al lado del bar había un zaguán oscuro y se escondieron en él y cuando la tuvieron al lado, se le echaron encima y tapándole la boca la metieron al zaguán. La felicidad que traía por las copitas de más, había desaparecido dando paso a un miedo atroz por lo desconocido.
    
    Patricia estaba servida, tenía pareja y era feliz con ella, pero no tenía ningún reparo en ayudar a su amiga a conseguir lo que quería, aunque fuera a la fuerza. Patricia tenía a Mireya agarrada con una mano y tapándole la boca con la otra. Se le acercó al oído y le dijo,
    
    -Hoy sí que vas a gozar puta.
    
    Mireya se resistía, tratándose de librar del brazo de Patricia, pero esta era otra vikinga, pero mucho más fuerte y ni usando toda su fuerza podría librarse de semejante mujer. Susana pensaba en cómo hacerlo, reaccionó de repente y ...
    ... buscó en el bolso de Mireya, las llaves de su piso. Se fue y abrió el portal y Patricia llevó a Mireya casi a rastras dentro.
    
    -Te voy a quitar la mano de la boca, pero como grites, te mato puta. Le dijo Patricia a Mireya
    
    -Dime cuál es la llave de tu casa, para no perder aquí media madrugada.
    
    -Es esa, la cuadrada grande.
    
    -Sigues viviendo en el tercero izquierda, ¿No?
    
    -Si, por favor no me hagas nada Susana, somos amigas.
    
    -Yo no soy tu amiga, soy la dependienta de un bar al que vas todos los días, pero no soy tu amiga. Y hace tiempo que te tenía ganas y hoy se me van a cumplir. Y saldremos satisfechas las dos, porque en mi mochila traigo un arnés con un pollón que compré para ti, para cuando este momento se diera. Te voy a dar polla hasta por las orejas, puta.
    
    Llegaron al piso, abrieron la puerta y Patricia soltó a Mireya y esta salió corriendo. Se metió en su cuarto y cerró la puerta. Patricia, que era la típica lesbiana marimacho, y de adolescente había entrado y salido de reformatorios, más que del colegio, sacó unos alambres de la mochila y abrió la cerradura sin ningún problema.
    
    -Qué estúpida eres, puta de mierda.
    
    -Ahora, por idiota, vas a sufrir en lugar de gozar. O quien sabe, a lo mejor descubrimos a una puta masoca en ti.
    
    -Agárrala Patricia
    
    Patricia la agarró por el pelo y con unas bragas de ella misma, que había recogido del suelo, le tapó la boca metiéndoselas hasta el fondo.
    
    Le agarró los brazos dejándola expuesta a Susana, que le ...