1. Amante de padres 3


    Fecha: 15/09/2025, Categorías: Gays Autor: pocker123, Fuente: TodoRelatos

    ... ella es la madrugada…__ me senté ardiendo ya por dentro con mis mejillas arreboladas de fuego. Mi verga punzaba poniéndose muy dura. Renato se había corrido un poco y volvió con una botella en la mano. Sirvió su copa nuevamente y la mía. Chocamos copas. Bebimos. Me miraba como un vampiro que va a despojar de sangre a su victima inocente y virgen. Cosa que yo no era ninguna de las dos, porque deseaba que atacara de una vez.
    
    __Tu sabes que te miro cada vez que voy a los partidos…__ se confeso, el no era parte de los que estaban siempre detrás del arco así es que no lo tenía en el radar. Me sorprendió con su confesión.
    
    __No no sabía, me miras ¿Cómo?__ respondí inocente
    
    __Te miro con deseos, de hombre, deseo de poseerte de hacerte mío, de cogerte, tu entiendes verdad…__ decía esto mientras acariciaba mi muslo y ya había agarrado mi pija como roca. Yo no perdí el control a pesar de mi calentura evidente, y solo pensé fugazmente: “que le pasa a estos hombres que los calientan los hombrecitos”. Se acerco un poco más y beso mi cuello tratando de levantar mi remera. Sus gemidos de hombre caliente empezaron a invadir el lugar.
    
    __No podrá venir tu esposa__ dije un poco incomodo
    
    __Ohh querido no conoces a mi esposa que duerme como mula. Pero si estas incomodo ven conmigo vamos…__ dijo y me tomo de la mano. Me deje guiar. Cruzamos el patio y entre unos frondosos árboles había otra construcción que yo nunca había visto.
    
    __Este es mi lugar, aquí estoy solo y hago lo que ...
    ... me viene en gana, si quiero privacidad vengo aquí y nadie me molesta…__ decía esto Renato y abría la puerta. El lugar era amplio. Un escritorio. Una cama. Un sofá grande. Todo olía a limpio. No me soltaba de la mano. Ahora yo estaba más relajado. Antes que nada se pegó a mí con calentura y buscando mi boca me estampo un delicioso beso profundo. Metiendo su lengua hasta el fondo de mi garganta. Nuestras salivas se cruzaron y se mezclaron de manera soberbia, húmeda, las lenguas chocaron sacando chispas. Aquel hombre era un volcán. Y supe que yo no era el primero en haber pasado por aquel lugar íntimo.
    
    Dejo en el piso la botella de vino. Me quito la remera y acaricio mis pezones que ya estaban erguidos. Me seguía besando profundamente, y pellizcaba mis pezones, mi verga ardía. Mi cola ardía. Todos mis sentidos estaban al máximo. Aquel abuelo sabía lo que hacía. Con una de sus manos me acariciaba y masajeaba el culo.
    
    __Ohh que delicia de chico eres Luqui…te gusta lo que el abuelito Renato hace, dime, te gusta no…__ susurraba entre besos y lamidas.
    
    __Si, si me gusta, claro, ahhh, eres tan fogoso abuelito…ohhh__ gemía yo mientras Renato quitaba mi pantalón poco a poco, hasta dejarme en bolas. Renato recorrió mi cuerpo hasta llegar a mi pija y empezar a masturbarme, acariciando mis bolas, gordas y llenas. Hacía semanas que nadie me tocaba y estaba que volaba. Me empujo a la cama y lo vi quitarse una a una sus prendas, bebió un poco mas de vino, su poronga apareció dura y ...