1. Acoso al hijo y derribo de la madre


    Fecha: 29/10/2025, Categorías: No Consentido Autor: biembre58, Fuente: CuentoRelatos

    ... sentada en la cocina fumando un cigarro y pensando en lo que había pasado, se sentía furiosa, pero también se sentía excitada, no estaba acostumbrada a que la tratasen con aquella insolencia, apago el cigarro y se fue a la cama y empezó a dar vueltas, su cuerpo sintió una calentura incontrolable, se sentía mujer después de mucho tiempo, Elisa todavía era joven y aunque no era muy agraciada su cuerpo era deseable, tenía unas buenas tetas y un buen culo, era morena y tenía media melena y aunque no era muy alta y estaba regordeta y con exceso de peso sintió una excitación imprevista se masturbo y se quedo dormida plácidamente.
    
    Pasados unos días Elisa se dio cuenta que le faltaba dinero de su monedero y la actitud de su hijo era cada día más desanimado, le pregunto si le pasaba algo y él lo negó y no quiso contestarle, aquello preocupo profundamente a Elisa.
    
    Una noche Elisa llego a su casa y su hijo estaba con sus amigos y se quedaron a cenar, Pedro le pidió el auto a su madre y fue con su amigo Celio a buscar unas pizzas, Luzbel se quedo con Elisa y le ayudo a descargar las compras que llevaba en el auto y a colocarlas en la cocina.
    
    – Sabes si le pasa algo a mi hijo – le pregunto Elisa a Luzbel – hace días que lo notó raro.
    
    – No trato con él todos los días – le contestó él – pero yo creo que su divorcio lo tiene deprimido.
    
    – Si. Lo he notado – dijo Elisa – no lo ha llevado bien y él es muy retraído… te pido que lo ayudéis y yo te estaría muy agradecida.
    
    – ...
    ... ¿como de agradecida estarías? – le pregunto Luzbel abalanzándose sobre Elisa y arrinconándola contra la encimera y posándole las manos en la cintura.
    
    Elisa estaba atrapada entre la encimera y el cuerpo de Luzbel que era más alto y corpulento que ella y quedo paralizada y no supo reaccionar mientras las manos de él se pusieron en sus nalgas y empezó a magrearla.
    
    – ¿qué haces? – grito ella – déjame
    
    – Yo creo que la que también necesitas algo eres tú – le susurro al oído – y yo puedo dártelo.
    
    – Que te has creído – le dijo Elisa mientras le apretó el pecho con las manos e intentó apartarse de él – no necesito nada de ti.
    
    – Tú y tu hijo necesitáis un hombre que os defienda y cubra vuestras necesidades – le susurro al oído mientras la sujetaba fuertemente.
    
    – ¿qué necesidades puedes darnos tú? – le grito Elisa enfurecida – suéltame ahora mismo
    
    – Una mujer como tú – le insinuó él – tanto tiempo sin follar, mira que crispada que estas
    
    Elisa le dio una bofetada en la cara, Luzbel le agarró la mano y se cruzaron unas miradas desafiantes y el la hizo agachar en el suelo mientras que con su mano se desabrochaba los pantalones y se sacaba la polla, Elisa hizo un gesto de exclamación y sorpresa al ver la polla tan grande que tenía él.
    
    – Toda esta polla va a ser para ti – le dijo él al notar el gesto de ella y le dio varios golpes con la polla en la cara
    
    Elisa le puso las manos en la cintura y hizo ademán de apartarlo, pero la fuerza de él lo hizo imposible y le ...