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Mi cuñado marroquí 2 (Cap VII)
Fecha: 29/11/2025, Categorías: Infidelidad Autor: Domadordepalabras, Fuente: TodoRelatos
... harta de cuidar sus espaldas, estoy harta de que ella no me haga ni puto caso, estoy harta de preocuparme por quien de mí no se preocupa. Y si esa mujer va sola a una fiesta sexual, va a ser su problema… Demasiado he sufrido ya - -¿Sufrir?… Vamos Miranda, no me jodas… Desde que has ido conmigo a todas estas fiestas, has destapado la puta que llevas dentro… Desde que has venido conmigo a todas estas bacanales sexuales, nunca habías disfrutado tanto… Reconoce que estás deseando ir a la calle el almendro… Porque sabes que vas a salir infinitamente follada de allí… Reconoce que te arde el coño… Reconoce que te mueres de ganas por volver a sentir varias vergas dentro de ti…- En ese momento, hubo un silencio… Esos instantes tensos de silencio, me estaban dejando clarísimo lo que mi esposa sentía… Aquello fue una verdadera declaración de intenciones… Aquello fue el momento catártico que quizás yo, había necesitado todo este tiempo… -Vete a tomar por culo hijo de puta…- -Te esperan dentro de tres horas… Recuerda llevar las bragas negras de encaje que tanto me gustan… Laura ya sabe qué ropa tiene que llevar. Y lleva el coño bien lubricado, que hoy te espera una buena juerga.- De repente, en la puerta de la venta, solté un grito desgarrador… Un grito de odio y rabia… Un grito de una ira irrefrenable… Esta vez no llamaría a Henry, ni a Lenka… Esto ya se escapaba de toda intencionalidad… Pero sabía perfectamente ...
... lo que pensaba hacer… Ya no le iba a dar más oportunidades, iba a casa y, esperaría allí para ver si Miranda se marchaba. Y si se iba… Todo terminaría. Sin malos rollos, sin súplicas, sin reproches… Todo habría terminado. Habían pasado cerca de 15 minutos desde que monté en moto y llegué a casa. Al abrir la puerta, Miranda me recibió bastante nerviosa. -¿Dónde has estado?- -No podía dormir y he salido a dar un paseo con la moto…- Miranda me miraba nerviosa, se agitaba, yo sabía perfectamente el motivo de su inquietud, de modo que preferí darle margen, preferí darle tiempo. Fui a la cocina para preparar un café, puesto que no me apetecía nada dormir. Mientras, podía ver como mi esposa iba de un lado para otro, visiblemente nerviosa, yo la miraba y la observaba y ella rehuía mi mirada. De todo aquello, saqué una conclusión básica, todo esto había sido gestionado como el culo. Quizás de primeras, tendría que haberla confrontado y haberla obligado a hablar. Y quizás, ella tenía que haber procedido de otra forma desde el principio… Pero no cabía duda de que la vida es así, nunca hay un momento para ser correcto, o para una actuación perfecta. Ahora, a toro pasado, se me ocurren infinidad de variables que podría haber tomado con este asunto. Después de tomarme mi café, le perdí la vista a mi esposa durante un par de minutos y me dirigí al dormitorio para ver qué hacía. Me acerqué sigilosamente y vi que ella había entrecerrado la ...