1. Encuentro en bikini con un señor maduro (2)


    Fecha: 01/12/2025, Categorías: Gays Autor: Mr Kohala, Fuente: CuentoRelatos

    ... sofá, me puse de rodillas ante mi amante y procedía a comerme su polla, que seguía sin estar dura. Nada más mi lengua empezó a recorrer su polla, el lanzó un leve suspiro y en inglés me dijo que llevaba esperando por tener su polla en mi boca desde la última vez, lo cual me prendió mucho y comencé a comérsela como una puta hambrienta y desesperada.
    
    Me tuvo a su merced en esa posición comiéndome su rabo un buen rato, no saben lo rico que es meterse en la boca un rabo que no está en acción o medio despierta y sentir que con tu sola boca y lengua se va haciendo cada vez más grande dentro de tu boca. Iba jugando con ella, mamada, lamida por su glande, recorrer su tronco mirando a los ojos de tu amante, darle un beso suave en su rica punta y pasar a comerse nuevamente. No sé cuánto duramos así, pero para mí se me hizo corto.
    
    En un momento, me paro y me levantó, me dio un rico beso para pasar a tumbarse en el sofá diciéndome que le pusiera el culo en su cara, mientras yo seguía comiéndole su polla. Me ilusionó hacer ese 69, porque ahora sí y no como antes, era la puta que quería ser y que estaba siendo, ya que estaban jugando con mi coño y preparándolo para recibir lo que tanto quería. En cuento sentí su lengua lamer alrededor de mi ano, sentí un escalofrío que me hizo erguirme y dejar de comerle la polla para sentir el placer de su lengua, a la vez que con sus manos me iba abriendo mis nalgas para jugar mejor.
    
    Como no se podía hacer mucho ruido o prácticamente nada, me ...
    ... comencé a comer de nuevo su polla, con una desesperación mayor. Así estuvimos otro rato, haciendo yo pausas para que no se corriera ya y debido a que ya también había empezado a meterme sus dedos en mi interior. Sabía que ya llegaba mi momento de cabalgar y darme un buen rodeo jejeje. A todas estas, yo seguía con mi tanga puesto y así se iba a quedar toda la sesión, lo que mi amigo ahí estaba bien duro y me dejaba empapado todo el tanga.
    
    Ya desesperado y con ganas de más, me despegué de él, me di la vuelta, lo besé y le dije “amor, es hora de follarte a tu puta, quiero tu polla dentro de mí”, a lo que él se acomodó y me dijo “como los viejos tiempos”. Quería mirarlo mientras me follaba y cabalgaba su rabo, por lo que, haciéndome a un lado el tanga, cogí con mi mano su polla, dándole una pequeña jalada y la dirigí a la entrada de mi ano, de mi coño esa noche.
    
    En los primeros centímetros que me fueron entrando, no sé quién tuvo un suspiro más fuerte de los dos, pero se notaba que los dos lo estábamos deseando. Una vez estuvo dentro por completo, me paré y le di un beso con pasión y empecé a moverme lentamente, sintiendo bien cada centímetro en mi coño.
    
    Una rica subida y bajada que estuve aumentando el ritmo cada vez más, mientras él me iba agarrando de la cadera y manoseándome las nalgas. Cada instante que iba pasando, el ritmo ya era de una rica follada sin parar y bien fuerte.
    
    Por momentos yo era el que dejaba de cabalgarlo y era el que sujetándome de las caderas el ...