-
Follada por mi esposo y dos amigos de él
Fecha: 02/12/2025, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Sarah Dafne, Fuente: CuentoRelatos
... obedecí. Los tres se bajaron al mismo tiempo sus bóxeres y me pusieron sus vergas frente al rostro para que las chupara. Fui turnándome entre todos ellos; les chupé las puntitas y las bolas mientras ellos me las untaban sobre los ojos, las mejillas y las tetas. No pude resistirme y comencé a masturbarme la conchita. Cogí aire y traté de meterme las tres vergas en la boca al mismo tiempo. —Vamos zorrita, muéstrame esa lengua —me dijo Santiago. Abrí la boca y saqué mi lengua mientras ellos me frotaban sus pollas en ella. Después de unos minutos, volvieron a llevarme a la cama y se prepararon para follarme. Santiago apoyó su espalda contra el cabecero mientras yo me montaba sobre él y me ensartaba su larga polla. —¡Eso! —Keev me dio una nalgada. Marcos se colocó detrás de mí, pegó su cuerpo a mi culo y comenzó a deslizar su polla en mi anito. —Ostia, Sant, te siento dentro de ella —le dijo a Santiago. El dolor me revolvió el estómago, pero rápidamente fue consumido por el deseo, sobre todo cuando Santiago empezó a chuparme los pezones. Traté de moverme, mi clítoris moría de ganas por frotarse contra la piel de Santiago, pero tener las dos vergas dentro de mí casi no me lo permitió. Keev fue el siguiente en acercarse, se arrodilló junto a Santiago y me indicó que comenzara a mamarle la polla. Se lo chupé y sentí que me acariciaba la cabeza indicándome que todo estaba bien. De pronto, Marcos aumentó sus movimientos y comenzó a follarme el culo ...
... con fuerza, empotrándome cada vez más sobre Santiago. Me aparté de la polla de Keev y le pedí que parara porque me estaba lastimando, pero este no lo hizo. Santiago me agarró con fuerza para que no pudiera moverme y también aumentó su penetración. —Quédate quieta, Sarah —Keev me agarró del cabello—. Querías que te tratáramos como a una puta, ahora soporta. Ambos hombres siguieron con sus envestidas cada vez más violentas y morbosas, pero entre más recibía, mi cuerpo comenzaba a acostumbrarse al escozor de sus vergas entrando y saliendo de mis agujeritos. Después de unos minutos, ambos me soltaron y yo brinqué sobre Marcos, me monté sobre él y me ensarté su verga. Lo cabalgué disfrutando mientras Santiago me azotaba el culo y Keev me masajeaba los pezones. —No sabes las ganas que tengo de follarte en el jardín —mi esposo me habló al oído. Su voz sonaba bastante ronca. Y por supuesto que lo haríamos, pero eso lo contaré en la parte dos. Tras follarme a Marcos, Santiago me alejó de él, me colocó sobre la cama y al abrirme las piernas, se introdujo en mí con una fuerza bruta. Me folló con tanta fuerza que un squirt salió de mi coñito. Después Keev hizo que me arrodillara sobre el suelo una vez más, me ordenó levantar mi culito y abrírmelo con las manos mientras ellos se masturbaban y descargaban todo su rico semen sobre mí. La tarde la terminé con las nalgas cubiertas de semen, bien follada y sabiendo que eso no se detendría ahí, pues aún sentía muchas ...