1. Lara, una chica muy obediente


    Fecha: 11/02/2019, Categorías: Dominación / BDSM Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos

    ... resultado de su obra.
    
    Lara sólo sollozaba ante tamaño avasallamiento de su intimidad y no opuso resistencia cuando Juani la tomó de un brazo para incorporarla.
    
    -¡De pie! ¡Sal de ahí! ¡Venga!
    
    -Por favor… Déjenme ir, por favor… -se atrevió a suplicar, aunque sabiendo que era más para acallar su conciencia que por un deseo real de escaparse. En realidad, se sentía cada vez más excitada a medida que la dominación de ambas chicas sobre ella iba creciendo.
    
    Eva y Juani la tomaron de los brazos y la llevaron otra vez a la habitación.
    
    -Échate allí. –le ordenó Eva señalándole la cama del medio. Lara ya no estaba en condiciones de resistirse, sumergida como se encontraba en ese vértigo hecho de temor y calentura. Agachó la cabeza, caminó hacia la cama y se tendió sobre ella de espaldas, con los ojos cerrados, un brazo cruzado sobre los pechos y la otra mano en su entrepierna.
    
    -¿Qué pasa, niña? ¿Te da vergüenza estar desnuda?... Sin embargo, con el cuerpo que tienes deberías sentirte orgullosa al exhibirlo… -le dijo Eva acercándose despacio. Lara abrió los ojos y la vio contonear las caderas mientras le sonreía provocativamente.
    
    Juani se acercaba por el otro lado y enseguida las tuvo a ambas junto a la cama, mirándola fijamente, o, mejor dicho, devorándola con los ojos. Eva fue la primera en inclinarse sobre ella, que de inmediato tensó todo su cuerpo en una espera hecha de temor y ansiedad. Se estremeció cuando Eva fue acercando su cara a la suya con expresión de ...
    ... deseo mientras Juani, sentada en el borde de la cama, le deslizaba una caricia lenta y suave en uno de sus muslos.
    
    -No… no pueden hacerme esto… no pu… -rogó Lara al borde del llanto, pero la súplica fue interrumpida por el beso de Eva en sus labios, que la hizo estremecer. Sólo por empecinamiento autodefensivo mantuvo su boca cerrada unos segundos, hasta que sintió la mano de Juani en su vulva mojada y entonces su boca, sus muslos y todo su ser, a la vez confundido y ardiendo, se abrieron a la nueva y embriagadora experiencia.
    
    -Así, bonita, así… muy bien… -le susurró Eva luego del beso largo y profundo que las había dejado sin aliento por un instante. Mientras los dedos expertos de Juani le entreabrían los labios externos de su vagina, la rubia empezó a pasarle la lengua por la oreja, y Lara, con la piel erizada, se deshizo en un prolongado gemido.
    
    -Ya la tenemos… -dijo Eva incorporándose.
    
    -Sí… -contestó Juani imitándola. –Esta niña está comprendiendo…
    
    Ambas comenzaron a quitarse el uniforme sin dejar de mirar a su presa con una expresión hecha de una fuerte tensión sexual y satisfacción por el éxito de la cacería.
    
    Lara, mientras tanto, luchaba consigo misma, con esa calentura que la encendía de pies a cabeza y con la culpa que la atormentaba poniéndola de cara a ese placer intenso que ambas chicas le estaban dando con su dominación y sus artes lésbicas.
    
    “¡No está bien! ¡no está bien” –se repetía una y otra vez tratando de que ese mandato se impusiera en su ...