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El desmadre que se formó el día que la familia con
Fecha: 28/12/2025, Categorías: Incesto Autor: Viejo Intrepido, Fuente: TodoRelatos
... sexualidad lésbica, y esa búsqueda me llevo a tener unas cuantas amigas intimas. - continuo tras dar un nuevo trago a su copa de cava – Cuando entre en la Universidad me pareció que allí tendría el desahogo que necesitaba, ya que, aunque no lo parezca, hay montones de chicas dispuestas a dar y regalar lo que yo buscaba, pero en unas clases, por cierto magistrales, que nos dio Marijo, me quede prendada de ella, sobre todo de su cuerpo, ya que como Carmen sabe, es un pedazo de mujer, guapa, inteligente, simpática, amena, alta, rubia, con un cuerpo de infarto y una capacidad de enseñar enorme. Como he explicado antes, me declaré su más fiel admiradora pues percibí enseguida que yo también le gustaba a ella, y acabamos siendo pareja, pero como he dicho solo como amigas, compañeras y amantes. Durante cuatro años ella me ha ayudado a estudiar y también a que no me despistase buscando placer o aventuras, pues ella me lo daba a raudales, hasta que apareció Santi, que sin pedirme permiso me hizo una foto. Fue algo extraño, pues nunca me había planteado tener nada con un hombre, primero porque mi propia madre me había inculcado que todos son unos hijos de puta, que solo quieren dominar a las mujeres, y por otro lado lo a gusto y satisfecha que me sentía con mi pareja, a pesar de que me llevaba casi quince años, pero que además de cariño y ternura, me daba estabilidad y me sabia encauzar para ser una buena cirujana, y a su vez yo la daba a ella tranquilidad y sosiego, no tenía que ...
... preocuparse de buscar desahogo y se centraba en su trabajo y sus clases . Santi es guapo y simpático, tiene gustos muy parecidos a los míos, y sobre todo fue la admiración que vi reflejada en sus ojos cuando me vio, lo que me animo a darle una oportunidad y nos sentamos en un banco a hablar, pero cuando me di cuenta de lo lanzado y descarado que es, terminé invitándolo a mi casa a tomar una cerveza, quizás para bajarle los humos e incluso reírme un poco de semejante sinvergüenza. Allí, ese mismo día conoció Santi a Marijo, a la que como yo sospechaba la sorprendimos ligerita de ropa, presentándosela como mi compañera de piso y a él como un nuevo compañero de curso, ya que ella nos iba a dar alguna que otra clase, pero el muy gamberro no disimulo en absoluto la fascinación que mi compañera de piso le causo, incluso diciéndole sin tapujos que no podría haber profesora que le enseñase, lo que ella le estaba enseñando, mirando descaradamente sus piernas, cosa que nos hizo gracia a las dos, tanto por su descaro como por su sinceridad. Tras una divertida tarde, en la que nos contó, entre otras muchas cosas, que había tenido cientos de novias, y se le notaba que estaba lanzado y decidido liarse con las dos a la vez si se terciaba, también nos dijo que era hijo de una pediatra y que por eso él estudiaba medicina, y cuando Marijo se enteró de que era hijo de su amiga y compañera Carmen, su actitud cambio de forma radical, y paso de divertirse a costa de un muchacho joven provocándole de ...