El desmadre que se formó el día que la familia con - Relatos Eróticos

El desmadre que se formó el día que la familia con

... demostrando con ello la confianza que tenía con los dos jóvenes, y luego mirando fijamente a Patri la dijo:

-Tu eres Patricia, la pequeñaja revoltosa y juguetona que tenía unas cosquillas tremendas. Pero hija estás desconocida, eres realmente una tremenda belleza.

-Ahora me parece recordarte, - dijo alborozada Patri dándola dos enormes besos – venias con Carmen a estudiar a mi casa y siempre me traías chuches, golosinas o juguetes, pero me martirizabas con tus cosquillas, pero yo te recordaba como Mary, no como Marijo.

-Es que tu hermana, Carmen, me llamaba Mary, - dijo ella con la mirada fija en su antigua compañera y amiga, acercándose lentamente hasta que de pronto la agarro dándola un abrazo descomunal y besándola apasionadamente en sus mofletes, para decirla a continuación – Siempre te he echado de menos mi osita.

-¡La madre que la pario! Ahora lo entiendo, y hay que joderse. – exclamo Julia riendo alegremente – Cuando la comía el coño siempre me decía “sigue mi osita, sigue”. Se debía estar imaginando que era Carmen y no yo.

-Es verdad, siempre te decía lo mismo. – dijo riendo también Santi – Sobre todo cuando estaba a punto de correrse.

-Pues esto merece que abramos otra botella de cava y celebremos que en un rato “su osita” le va a comer el conejo. – dijo alegremente Patri – Pero antes debe de contarnos Marijo, Mary, o como cojones se llame este pedazo de rubia que esta buenísima, porque no se declaró a mi hermana en su momento y ha sido capaz de ...

... perder tanto tiempo, pues Carmen creo que no habría sido capaz de rechazarla.

Lo decía Patri señalando a las dos amigas que seguían abrazadas y dándose dulces y suaves besos en sus mejillas, demostrando que aun prevalecía la amistad y el cariño que se habían profesado en el pasado. Le costó a Mary separarse de Carmen, que nerviosamente fue a la cocina a por la botella de cava y una copa para su amiga y al parecer también su eterna enamorada. Brindaron cuando Julia dijo:

-Por el amor de dos amigas, que no fueron capaces de ser sinceras, y para que disfruten juntas todo el tiempo que les queda por delante.

Fue Francis la que invito a todos a sentarse en los sillones y el enorme sofá que había en el salón, sentándose Mary, Carmen y Patri en el sofá y Santi y Julia en los dos sillones, y Francis se sentó sobre las rodillas de su hermano a la vez que instaba a Mary a que les contase su vida desde el momento que conoció a su madre. Entonces tomo la palabra la aludida diciendo:

-Mejor os cuento desde que soy consciente de mis actos, para que sepáis lo que realmente me ocurrió al conocer a mi osita. Soy de un pequeño pueblo, pero tampoco puedo decir que sea de una familia pobre, ya que mis padres eran dueños de una enorme hacienda. Mi maestra les dijo que yo era una niña demasiado inteligente para el colegio del pueblo y les insinuó la necesidad de que yo estudiase en un colegio especial para niños superdotados, y como mis padres tenían posibilidades de financiarme, me ...