8 días antes de la boda
Fecha: 17/08/2017,
Categorías:
Hetero
Autor: ladooscuro, Fuente: CuentoRelatos
... miró desconcertada. –Si quieres que me corra dentro de ti tendrás que rogármelo puta, por ahora mira… -dije señalando mi aun endurecida polla. – Me has dejado toda sucia la verga con tu corrida… límpiala…
Ella se arrodillo obedientemente, la sostuvo en su mano y la observó dudando un instante, noto en sus dedos las palpitaciones de mis marcadas venas, y el brillante flujo de su corrida bajando por el tronco, con menos confianza de la que aparentaba abrió su boca y se metió la cabeza de mi verga entre sus labios. Podía sentir su lengua moviéndose en círculos. Cerró los ojos mientras se entregaba a su trabajo, se excitó de nuevo por lo que estaba haciendo y bajo su otra mano hasta su coño, empezando a masturbarse.
-¿Quién te ha dicho que puedes masturbarte zorra? Y mírame a los ojos mientras me la comes.
-Como digas papi… - dijo regresando su mano hasta mi vientre, y apoyándose en el para levantarse un poco, entonces saco su lengua y lamió todo el tronco de mi verga mirándome directo a los ojos, recogiendo en su camino todos los restos de su corrida. Al terminar de dejármela limpia se alzó un poco y saco su lengua, mostrándome la clara marca de su propia corrida en su lengua. La visión bastaba para que me corriera pero de algún modo logre contenerme.
-Tienes tus tabúes pero parece que los superas rápido ¿eh perrita?
-A ti te gusta que sea una cerdita sucia papi… y eso me excita a mí, quiero ser lo que tú quieras y darte mucho placer… ¿Lo hago bien ...
... papito?
-Sí, así me gusta que seas… sucia y atrevida.
-Entonces, ¿me merezco un premio papi? ¿Me darás tu lechita?
-Te la daré, pero aún no en tu coño puta, quiero que la desees tanto ahí que me ruegues que lo haga… por ahora síguemela chupando hasta que me corra, te la tragaras toda ¿entendido?
Por toda respuesta se agacho de nuevo y siguió lamiéndomela, siempre mirándome a los ojos, jugando con mis testículos y metiéndosela cuanto podía en la boca. Yo me regocijaba en sus caricias, lo hacía excelentemente y pronto me tendría a punto de correrme otra vez. Unos minutos después se detuvo y empezó a masturbarme mientras me veía con sensualidad y una sonrisa de orgullo en el rostro.
-Que rico es volver a tenerla para mi papito, había olvidado lo gruesa que es… y lo caliente y dura que se pone… ¿Te gusta cómo lo hago papito? ¿Le darás a tu zorra hija tu lechita? Tengo mucha sed papi... dámela… -y agregó con un susurro- Onegai shimasu…
La frase fue lo último que necesite, tensando mis músculos empecé a correrme con fuerza manchando su cara y mi vientre, ella tan pronto lo noto se la metió de nuevo en la boca y aguantó el resto de los chorros de semen que salían. Cuando estos terminaron ella se separó y viéndome a los ojos empezó a tragar.
-Mmm delicioso papito… es lo más rico que he probado. ¡Oh! Parece que derrame un poco, perdóname papito, ya lo recojo. –dijo estirándose y lamiendo la corrida de mi vientre. –Y aquí tengo más…- agregó dirigiendo su mano hasta su ...