Un viaje al campo, una casualidad y una noche de fantasías hechas realidad - Relatos Eróticos

Un viaje al campo, una casualidad y una noche de fantasías hechas realidad

... mí, quedará grabada en mi mente para siempre, fue excitante!!!!!!.

En eso estábamos el penetrándola, ella mamándome la verga mientras mis manos le masajeaban las tetas y las de Vinicio las nalgas a la par de ligeros golpes hasta que llegó su segundo orgasmo. Sus gemidos se escuchaban yo creo por todos lados y por un buen rato, mientras Vinicio bajaba el ritmo para darle tiempo a que se recuperara mientras la giraba sobre él para penetrarla por la vagina desde atrás bombeándola con fuerza, ella gemía como loca y disfrutaba como un ángel mi verga se sentía hirviendo por lo que en un momento determinado al ver a Vinicio boca arriba con mi novia de espaldas casi recostada sobre él se me ocurrió penetrarla de la misma forma así que me acerque y puse mi verga en lo que quedaba de espacio de su vagina y comencé a meterla Vinicio dejo de moverse y espero a que yo estuviera a dentro una vez ahí nos movimos al ritmos de un vaivén que supo a gloria y que ella disfrutaba y daba a notar con gemidos de placer pidiendo a la vez que la penetráramos mas

Así tenía yo a mi novia cómo había deseado por tanto tiempo. Emputecida, regalando sus nalgas a mi amigo, y al mismo tiempo a mí. Ella nos tocaba desesperadamente los pechos las nalgas quería sentir quería tocar cada parte de nuestros cuerpos como queriendo grabar en su sentido del tacto cada momento de aquella embestida que le estábamos dando, y deliberadamente hablando como una cualquiera. Y nosotros tratándola como tal, Vinicio ...

... comenzó a tratarla como la puta que para él era. Le jalaba el cabello para besarla en la boca, le decía maldita puta, zorra, ramera, buscona, calienta huevos, mama vergas golfa, Huila, piruja, perra zorra y cabrona, y demás peyorativos por el estilo. Pero a ella no le importaba, se calentaba más, se encendía como loca. Ella me preguntaba, si me gustaba que fuera una ramera, que si me gustaba que fuera todo eso, que Vinicio le dijera que si le gustaba como se la culeaba, yo le dije que si, en un momento Vinicio me vio y me dijo así te gusta compadre ver que me cojo a tu novia sin dudarlo asentí mientras seguíamos taladrando conjuntamente esa panocha que era mía y que en ese momento me encontraba compartiendo con mi amigo.

Era extraordinario la forma en cómo se la cogía, él la sostenía de las nalgas mientras ella se comía esos trozos de carne, su comportamiento era sin igual jamás la había visto de esa forma con tal frenesí, era algo loco …..

Así cójanme no se detengan decía métanme su verga y destrócenme la panocha, no tengan piedad que siento que me voy a venir, anden muevan la verga así rico muy rico…! –suspiraba.

Así te gusta? le dijo él. Siéntela te llega hasta el fondo riendo te las comiste chiquita no cabe duda que eres una putita, golosa que le encanta la verga y aprietas mamita como si fuera la primera vez.

Me encanta ser una puta, me dijo, así que no pares le dijo a Vinicio a él (refiriéndose a mi) le gusta que su noviecita sea muy puta le encanta verme con la ...