Vacaciones calientes - Relatos Eróticos

Vacaciones calientes

Después de desembarcar y esperando recibir la maleta me estaba fijando que estaba más solo que la luna parejas amigos amigas prácticamente todos estaban acompañados en cambio yo había venido solo a la isla. 

Es verdad que me fijé genéricamente en todas las mujeres que pude jóvenes no tan jóvenes solas o con sus parejas imaginándome poder disfrutar de alguna. 

Ya con mi maleta en la mano me dirigí a coger un taxi para llegar a mi hotel casi a la vez tropecé con un matrimonio de mediana edad ambos corpulentos pedí disculpas y el hombre las aceptó no teníamos muy claro quién se quedaría con él taxi pero la mujer comentó que sí íbamos por el mismo sitio podíamos compartirlo. 

El taxista cuando salió del vehículo nos preguntó si veníamos juntos la mujer contó desparpajo dijo que en principio no pero que podíamos compartir el taxi dándole las direcciones de los hoteles este estuvo de acuerdo ya que se encontraban próximos. 

Me senté en la parte trasera del taxi y pude ver aquella mujer al entrar como me enseñaba con todo esplendor unas bragas o bañador blanco llevaba un vestido corto amplio que dejaba sus dos grandes pechos muy a la vista era guapa risueña y sin ninguna duda con una bonita sonrisa. 

Se dio cuenta de que yo pude ver su entrepierna y desde luego no parece importarle ya que para ponerse el cinturón movió su trasero dentro del vehículo subiendo su vestido hasta dejarme a la vista sus gruesos muslos sin hacer amago de taparlos. 

La mujer entabló ...

... conversación conmigo mientras el marido lo hacía con el taxista, esta se interesó por mi situación al verme solo comentándole yo que habían sido unas vacaciones programadas pero que había terminado con mi novia. 

La mujer puso una mano en mi pierna comentando que era una pena que estuviese solo así hasta que llegamos primero a mi hotel, nos despedimos y cuando iba a pagar mi parte de la carrera la mujer comentó que lo harían ellos insistiendo me di por invitado. 

Al día siguiente estando tumbado en la playa, llegó la pareja Marisa y Jaime que enseguida se dieron cuenta de mi presencia. 

Ella enseguida me preguntó si me importaba que se posiciona al lado cosa que a mí me daba igual la mujer colocó su toalla junto a la mía y su marido al lado de esta sinceramente tenía nada de mis padres pero la mujer llama la atención. 

Yo llevaba un minúsculo bañador de competición el hombre venía con uno bastante grande y la mujer con un vestido playero que sacó por encima de su cabeza dejando la vista unos espectaculares pechos y una braguita de bañador algo escueta. 

El matrimonio se dio crema uno al otro ofreciéndose la mujer a hacerlo conmigo cosa que decliné la imitación aunque media hora después la mujer al verme algo Colorado me embadurnó la espalda y mis piernas quedándome yo con un buen calentón .

El marido no hablaba mucho pero sí que me preguntó si conociera la isla y zonas privadas de budismo o de ambiente nocturno. 

Le dije que estaba perdido y que tendría que ...