1. Verano 2016


    Fecha: 05/04/2019, Categorías: Gays Autor: angelmatsson, Fuente: SexoSinTabues

    ... pequeña sensación victoriosa. Alrededor de 15 centímetros, ligeramente gruesa. De un color notoriamente más oscura que el resto de su piel. No estaba circuncidado, y su prepucio cubría parcialmente su glande de un color rosa oscuro. A pesar de que su cuerpo era lampiño y sólo tenía una pequeña capa de vellos rubios, en su pubis habían gruesos pelos negros y rizados, aunque en poca cantidad. Sus huevos eran gordos y con un par de pelos, nada más. Usé toda mi fuerza de voluntad en no mirarlo durante la paja. No quería hacerlo sentir incómodo, aunque noté que él varias veces miró en mi dirección. Al cabo de unos minutos, su verga liberó el contenido acumulado y, en efecto, disparos de semen saltaron sobre su pecho. Estiré mi mano hacia el mueble que estaba al lado de mi cama y saqué unos clínex para entregárselos. Su pene seguía duro, y estaba bañado de una sustancia viscosa al igual que sus dedos. Esa noche terminó así. Grata fue mi sorpresa que, la noche siguiente, estaba ansioso por que nos fuéramos a acostar para repetir lo de la noche anterior. Obviamente acepté. Cuando llegué a mi habitación, él estaba acostado con el notebook sobre su abdomen. Una vez cerré la puerta, se destapó y se mostró completamente desnudo. -Wow, estas un poco desesperado –comenté. Mi erección ya se había formado. -No hay que perder tiempo –dijo. Y obviamente no le maté la ilusión. La primera paja terminó bien. Después nos limpiamos y comenzamos a ver videos en youtube. Al cabo de las horas, y ...
    ... cuando ya era más de media noche, la conversación se tornó hot. Coincidimos en que era buen momento de otra paja. Pero esta fue distinta, noté que sus ojos no se despegaban de mi pene. Y como ya sabía, él no haría nada sin que yo le diera un empujoncito. Armándome de valor, quité su mano de su verga y coloqué la mía. Acto seguido, guie su mano a mi pene, y sin dudarlo lo tomó. -Verás que se siente mejor –le dije. Ninguno tenía apuro en hacer acabar al otro. En realidad, creo que disfrutábamos del tacto. Mi mano estaba empapada de su líquido pre seminal, al igual que la suya. A ninguno pareció molestar. Fui más allá, acaricié sus huevos y, tímidamente, acaricié la zona cercana a su ano. Se tensó, pero no se quitó. Su expresión cambió. Era como si su cerebro hubiese dejado de poner atención al resto de su cuerpo y sólo se concentró en una batalla interna. No era estúpido, sabía para donde iba todo esto. Y sabía que yo no era un estúpido, y que me daba cuenta que, en parte, a él le estaba gustando todo esto y seguía el juego. ¿Qué hacer? De pronto volvió al planeta tierra (Su verga seguía igual de dura). Me miró, pero en su rostro no estaba la expresión medianamente infantil de siempre. Ahora estaba serio. -¿Me prometes que no dirás nada de esto? -Claro que no –respondí impactado ante la pregunta. Y extremadamente excitado, también. Pero mi conciencia habló. Siempre está ahí la estúpida esa, ojalá algún día se muera. Dijo que quizás estaba llevando las cosas al extremo. Quizás me ...
«1...3456»