Las vacaciones de mi hijo en casa de su abuela -2-
Fecha: 27/04/2019,
Categorías:
Confesiones
Autor: Manuela, Fuente: CuentoRelatos
Hola a todos, soy Manuela, esta es la segunda parte de la historia de las vacaciones de mi hijo en casa de su abuela. Como ya recuerdan yo me tuve que ir de viaje a Madrid por motivos de trabajo y mi hijo pasaría el resto de las vacaciones en casa de su abuela. Pare entender mejor este relato es necesario haber leído el anterior.
—Abuela antes de nadar voy a jugar un poco a la play en la habitación si no te importa.
—Claro hijo, haz lo que quieras, cuando vayas a nadar, avísame y si he acabado de preparar la comida voy contigo.
—Vale.
Así pues, mi hijo se fue a jugar a la consola y mi madre a hacer las tareas cuando minutos más tarde llego Pili la vecina.
—Pensé que estaríais en la piscina, ¿o es que era una broma lo de tu nieto?
—Habla despacio que tengo una idea. Ven conmigo a la cocina y te cuento. No era ninguna broma y te lo voy a demostrar. Él no sabe que estas aquí, se irá a nadar de un momento a otro, ahora está jugando, lo único que tienes que hacer es desnudarte y meterte conmigo desnuda en la piscina.
—¡¿Como?!!!? ¡¿Desnuda?! Ni loca mujer, eso es demasiado, solo he venido a comprobar si era real.
—Jajaja el problema es que cuando lo veas vas a querer probar.
Antes de que Pili pudiese responder Dani gritó:
—¡Abuela!! Me voy a nadar un rato ¿has acabado?
—¡No me queda mucho! En unos minutos voy, puedes ir ya que luego voy.
Así pues, mi hijo Dani se metió en la piscina desnudo, con su miembro flácido colgando y mi madre y su ...
... vecina Pili se fueron a la habitación a verle detrás de la ventana.
—Dios, mujer, sí que lo tiene grande.
—Pues espera que se le pare, ahora solo esta flácido.
—¡¿De verdad?!
—Claro! Yo no te obligo a nada, pero si quieres probar este es el plan a seguir, nos metemos desnudas y yo hago el resto.
—Ufff no sé, tengo ganas, pero no quiero que lo sepa mi marido… A ver si nos va a ver alguien.
—Tranquila mujer, empezamos ahí y el resto lo hacemos dentro así nadie te ve ni te escucha ¿te parece bien?
—¿Y mi marido?
—Nadie se lo va a decir a tu marido tranquila.
Así pues, mi madre y la señora Pili se desnudaron y entraron en la piscina ante el asombro de mi hijo Dani. Ya sabéis como es mi madre físicamente, mantiene un buen cuerpo, con algún que otro kilito de más, pero sin llegar a estar rellenita y con dos pechos y trasero tremendos. Pili tenía los pechos más pequeños y caídos, pero tenía un trasero muy grande. Al ver la cara de asombro de mi hijo, mi madre dijo:
—Daniel no te importa que mi vecina se bañe con nosotros ¿verdad? Es que su piscina tiene un problema y hace mucho calor así que quería refrescarse.
—Eeeeh no, no claro que no por mí no hay ningún problema, si queréis me puedo ir y dejaros solas
—No no quédate, si no nos molestas. Además, hace calor, mejor estar dentro del agua.
Mi madre se alejó un poco y se puso a hablar con Pili suavemente:
—Sígueme el juego
—De que hablas?
—Tu solo sígueme el juego.
—Vale.
—¡Daniel! Nos ...