1. Una piscina climatizada para cuerpos irresistibles


    Fecha: 13/05/2019, Categorías: Incesto Autor: janpaul, Fuente: CuentoRelatos

    ... cama o ir a nadar en verano, en invierno solía ir, pero no le gustaba para nada el cura. A Mauro, según decía, tampoco le gustaba el cura porque una vez se confesó que le gustaban los chicos y le dio un sermón de “padre y señor mío”. A mí me parecía que cada uno podía tener su opinión, pero si yo le pido al papá de Mauro que me lo deje traer a casa porque es amigo, él tiene derecho a pedirme que quiere ver a su hijo en una de sus costumbres familiares. Allí estaremos los cuatro por nuestro amigo Mauro.
    
    Llegó el domingo. Habíamos hablado con los abuelos y la abuela se apuntó a venir con nosotros, porque ella antes tenía costumbre, pero ella haría otras cosas mientras nosotros estuviéramos con el papá de Mauro. Al por cierto, el papá de Mauro es Mauro y su mamá María. El papá de Zigor es Ernesto y su mamá Luisa Isabela.
    
    A los cuatro los encontramos en la Iglesia, las dos mujeres muy adelante en los bancos, pero no juntas. Luego supe que estaba cada una con su cofradía. Los papás, Mauro y Ernesto estuvieron de pie, al final de la iglesia. Nosotros nos sentamos en un banco que estaba solitario hacia la mitad de la Iglesia, los cuatro juntos: Zigor, Mauro, Lorenzo y Joel, que soy yo.
    
    Se acabó la misa, el sermón me pareció largo, pero soportable. Zigor fue a saludar a su mamá y en la calle su papá esperaba a su mamá y se encontraron los tres y una hermana. Los saludamos nosotros tres y nos juntamos luego los cuatro con el papá de Mauro. Nos invitó a la cafetería, empeñado ...
    ... en que desayunáramos, pero ya lo habíamos hecho. La gente que salía de la iglesia le felicitaban por su hijo y sus amigos, todos tan buenitos. Menos mal que no sabían nada de lo que hacíamos ni de lo que íbamos a hacer. Dejamos que nos invitara y tomamos una cola cada uno. Nos despedimos y fuimos a recoger a la abuela a la puerta del super, como habíamos quedado.
    
    Por tratarse de un domingo, no había muchas cosas que hacer, pero nosotros teníamos ocupación. Salimos los cuatro a correr vestidos solo con short por el bosque en dirección al claro que ya habíamos conocido. Cuando llegamos allí, después de unos estiramientos y con el calor que hacía nos tumbamos en el suelo en la parte donde había algo de hierba. Allí nos entraron las ganas y allí comenzó nuestra orgía.
    
    Sin que nadie lo ordenara pero hubo un general “short fuera” y se hizo evidente el desplome y el mandamiento de nuestras pollas para que se pusieran buenas. Me puse a ayudar a Lorenzo mamándosela y se animaron los chicos a mamársela haciendo un 69. Lorenzo y yo hicimos el 69, pero Lorenzo la emprendió con mi culo mientras yo le preparaba su polla. Se me puso detrás mío estando yo en posición fetal y comenzó a meter polla en el agujero de mi culo. Lo había preparado bien, pero ese día me dolía su intento y comencé a gritar, vinieron los dos chicos y Mauro comenzó a chupar la polla de Lorenzo mientras la metía dándole masajes con la lengua y llenándola de su saliva. Con un poco de dolor entró y se quedó Lorenzo ...