Sombras del deseo
Fecha: 27/05/2019,
Categorías:
Erotismo y amor
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... hasta que tuviera lo que deseaba, pues para mí esos sueños eran cada vez más reales.
La espera duró 5 meses, justo mi último día de clases y su último día de trabajo. Desesperado por llegar a casa aquel día me importó poco no realizar mi examen final del semestre, pero mis esperanzas se desmoronaron cuando al llegar a casa, contemplé que estaba el auto de su esposo, quien había ido a recoger a sus hijas. Totalmente exasperado me encerré en mi cuarto, oyendo a lo lejos el sonido de aquel auto que ahora se llevaba mi sueño.
Mi madre solo me preparó comida y se fue al supermercado, dejándome en la fría soledad.
Pero antes de que me quedara dormido, resonó en mis oídos el sonido de otro auto.
¡Era ella!
No podía esconder la cara de idiota que tenía al saludarla. -Oye Lalo- me dijo- , sabes que tengo una reunión por el fin de cursos pero necesitaba darme un baño-.
¡Lotería! Solo debía entretenerla mientras colocaba la cámara en el baño, -¿No prefiere comer primero?- comenté suspicazmente -¡La comida de hoy estuvo de agasajo-.
-¡No! -respondió-Tengo mucha prisa, mejor a lo que vengo-.
¡Demonios! Había fallado la artimaña, aún me quedaba confiar en entrar mientras estaba dentro de la ducha para dejar la cámara. Así que esperé el momento oportuno, pero me temblaban las piernas y sentí mucho temor, aun cuando escuché el sonido del agua dentro del cuarto de baño.
Entonces como voz del cielo me dijo desde la ducha- ¡Lalo! Necesito una toalla, ¿Podrías ...
... pasarme una?-
¡Era lo que necesitaba¡ Nervioso abrí la puerta y tomé la toalla, colocando rápidamente el aparato dentro de la cómoda, un chispazo de inteligencia me dijo que debía poner fuera de su alcance la ropa interior que se iba a poner, para que, al momento de salir por ella tuviera la toma del año.
Pero sus prendas descansaban sobre el tubo que sostenía la cortina, el haberlas quitado, hubiera provocado su reclamo, sin embargo aproveché una única oportunidad, pues arrojé la toalla por encima del tubo sobre su ropa interior.-¡¡Gracias!!- se reservó a contestarme-.
En una hora, ella ya había salido y yo preparándome para ver ese vídeo, con cierto miedo a que las cosas no hubieran salido bien, todo había funcionado, pues al bajar la toalla, su pantaleta y sostén cayeron, al parecer atrapó en el aire la pantaleta, pero el sujetador calló en el agua.
La salida de la ducha fue espectacular, por fin contemple sus tetas, tan delineadas como siempre las había imaginado, sus lindos pezones color café claro sobresalían de esas joyas que tenía por pechos, mientras ella los secaba con la toalla, yo estaba totalmente excitado viéndola rozar esos senos con la toalla, meciéndolos de un lado para el otro. Solo podía revolcarme de placer mientras me masturbaba al ver semejante espectáculo.
Pero... pronto esa dicha se convirtió en espanto, vi como después de vestirse se acercaba hacia la cámara y la tomaba, pues por ese momento se enfocó el suelo del cuarto de baño, aquellos ...