1. Almas cruzadas


    Fecha: 13/06/2019, Categorías: Incesto Autor: dulces.placeres, Fuente: CuentoRelatos

    ... a esta altura Adriana se me hacía irresistible, Mike asintió con su cabeza y Claudia tenía un brillo pícaro en su mirada, fui a su lado y me moví con poca gracia tratando de mantener la distancia, pero era lógico que esa mujer tuviera otro propósito por lo que buscó acercarse, y lo hizo, quería evitarlo pero sentía mis sienes latir con fuerza y mi frente transpirarse, Adriana estaba demasiado cerca con el pecado en sus labios, casi respirando mi aliento, era el final…
    
    Adriana se abalanzó y apretó sus labios contra los míos, metió su lengua en mi boca robándome un beso, me miró y largó una carcajada ante mi resistencia
    
    Ja! ja! no voy a comerte! Vamos! agarrame el culo!
    
    Tomó mis manos he hizo que apretara con fuerza sus nalgas, reaccioné sintiendo en mis manos la dureza de sus pequeños y proporcionados glúteos, busqué a mi esposa con la mirada, pero para mi sorpresa ella estaba sentada sobre las piernas de Mike y ambos atentos a nosotros, observando nuestras siluetas.
    
    Adriana volvió a acapararme y a comerme la boca, notando que aún me resistía y no me dejaba llevar, levantó su pollera para que ahora el contacto entre su culo y mis manos sea piel a piel, me sorprendió llevando sus dedos a mi entrepierna para agarrar mi falo con fuerza, para decirme que lo quería, que lo deseaba.
    
    Por segunda vez volví la mirada donde estaban Mike y Claudia, mi esposa ya estaba con el torso completamente desnudo y el lamiéndole las generosas tetas con un poco de desesperación, ...
    ... ella me devolvió la mirada, con un dejo de puta satisfacción, el cuadro produjo sensaciones encontradas, mi esposa en manos de otro tipo, sería cogida en breve, y ella se mostraba feliz, una sensación terrible de profundos celos me invadió, mezclada con ira, mezclada con locura, mezclada con un indescriptible placer…
    
    Las cartas estaban echadas, Adriana viendo que aún no le prestaba la suficiente atención aceleró a fondo, se dio vuelta, dándome la espalda, sacó su tanga, escupió en su mano y se untó el culo y me desafió
    
    Dale boludo! Cojamos mejor que ellos, dale! rómpeme el culo, dale! hacémelo por el culo!
    
    No podía creer lo que escuchaba, pero Adriana parecía decidida, solo desnudé mi sexo, apunté y toda adentro, hasta las bolas, toda en su apretado culo…
    
    Como expresar en un frío papel la sensación de hacerle el orto a mí amiga, a mí socia? Como expresar sus gemidos? Como expresar mis sensaciones al observar como a un par de metros de donde estábamos Claudia le chupaba la verga a Mike? Como narrar toda esa locura de ese momento?
    
    Perdí la noción del tiempo, cogimos con locura, con pasión, esa mujer me hizo recobrar la pasión, la juventud, la locura.
    
    Cuando terminamos comencé pensar con cordura, con noción de tiempo y de espacio, Adriana comenzó a vestirse, hice lo propio mirándola dulcemente, los suaves gemidos de Claudia llegaron a nuestros oídos, Adriana y yo nos miramos, entonces le dije
    
    Parece que no han terminado…
    
    Repasé discretamente con la vista, ...
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