HAY COSAS QUE NO ENTIENDO v
Fecha: 27/08/2017,
Categorías:
Incesto
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Muy buenas tardes a todo el mundo. Como ya saben mis lectores y lectoras, mi nombre es Yolanda, vivo en Bilbao con mis papás y mi hermano Iker. A pesar de tener solo 14 años, mi vida sexual empezó siendo muy joven y en mi casa el sexo es tan natural que los cuatro lo vivimos y lo disfrutamos como algo natural todos los días.
En mis relatos anteriores os he ido contando distintas experiencias que nos ha ocurrido, pero en esta ocasión os voy a contar mi primera experiencia completa, que fue con mi papá, naturalmente. Anteriormente yo había visto follar a mis papás y a mi hermano, que tiene 24 años, con mamá y con papá. Muchas veces con los dos juntos. De forma que para mi no era nada extraño.
Esto fue el día de mi 8º cumpleaños. Días antes yo veía a mamá y a papá mirarme de forma rara. Cuchicheaban entre ellos, se les escapaban risitas y mamá me trataba como si me fuera de casa. Ya hacia mas de un año que yo tenia sexo con mamá, pero sin penetrarme, ni siquiera con sus juguetes. Solo jugábamos, pero en los últimos días. ella lo hacia con un gesto de melancolía, como recordando como era ella a mi edad, o algo así.
Yo esperaba celebrar mi cumpleaños como el anterior, regalos, una buena comida fuera de casa y parque de atracciones. Pero cuando por la mañana vi que no habían preparado nada, me sentí muy triste. Pensé que se habían olvidado. Papá estaba muy cariñoso conmigo, aunque siempre lo era. En nuestra familia no se usa ropa interior, así. que cuando pasaba a mi lado ...
... o yo al suyo, siempre me echaba la mano al culete o a los diminutos pechos que tenia y me acariciaba con mucha suavidad. Pero ese día era distinto. Yo sabia que algo les pasaba, pero no sabia qué.
Después de comer, mamá y mi hermano se fueron al dormitorio de Iker a echar un polvo, era casi la rutina de todos los sábados. papá solía echarse una siesta, a veces conmigo, y después se iba a follar con mamá y mi hermano. Yo siempre me sentí un poco desplazada. Quería estar con ellos. Pero esta vez papá no fue a echar la siesta. Me pidió si quería ir a con el a la cama a dormir un rato. Yo estaba encantada, solía ir con el de vez en cuando, y se dormía con sus manos tocándome toda, me sentía como una reina mientras oía gemir a mamá e Iker en su dormitorio.
Cuando llegamos a su dormitorio nos quitamos la ropa. Yo ya estaba acostumbrada a verle la polla a mi papá. La tenia enorme, mucho mas de las que he visto en los últimos años. Incluso se la había cogido alguna vez. Le gustaba que me durmiera con ella en la mano, o que se la frotara cuando nos duchábamos. Pesaba mucho para mis manitas. Enseguida me di cuenta de que no iba a haber siesta. Mi papá me dijo:
- Ya te has dado cuenta de que hoy no ha habido ni regalos ni fiesta. El motivo es que hoy es un día muy especial para ti. Hace semanas que tu madre y yo lo estamos hablando. Ha llegado el momento de que dejes de ser virgen y disfrutes del sexo al completo, como mamá conmigo y tu hermano.
Yo estaba sin palabras. Por ...