Mi esposa de paseo con sus compañeros - Relatos Eróticos

Mi esposa de paseo con sus compañeros

En esta ocasión les voy a contar otra aventura de mi esposa, en una de esas noches que normalmente platicamos y nos contamos como nos fue en la oficina, me comento que unos compañeros de trabajo le habían insistido mucho que les aceptará un invitación a pasar un rato en la playa comiendo y tomando y como anteriormente le había dicho que les aceptará, me comento que iría con ellos el viernes, entonces le dije que se pusiera ropa para la ocasión y se pusiera ropa interior sexy por si pasaba algo.

Llego el día y se fue a la oficina vestida con saco y falda y abajo ropa interior negra transparente, ya en la noche y después de bañarse y ponerse un baby doll, ya acostados, me contó con detalle lo que había pasado.

En la tarde al finalizar las labores se acercaron Luís y Pedro y me dijeron que me veía muy guapa y sexy… les di las gracias por sus halagos y para no despertar sospechas me dijeron que me esperaban en el estacionamiento, cuando llegue ya nos subimos a la camioneta de Luis, yo del lado del conductor y Pedro atrás, durante camino, me dijeron que estaban agradecidos que haya aceptado su invitación y que no me iba a arrepentir, que la íbamos a pasar muy bien, como estaba muy nerviosa, les dije que si tenían algún dulce y me ofrecieron chicles, lo tome y me fui tranquilizando, me siguieron diciendo que era una mujer muy linda y agradable.

Cuando llegamos a la playa, tomaron camino a un lugar alejado, donde casi no había gente y les dije que por que en un lugar tan ...

... solitario… me contestaron que era mejor así porque nadie nos molestaría y tendríamos privacidad.

Llegamos al lugar, nos bajamos y nos fuimos atrás de la camioneta, abrieron la cajuela para estar más cómodos y me di cuenta que llevaban una hielera, whisky, refrescos, entonces les dije, se prepararon bien, contestándome que sí, que la finalidad era pasar una velada muy agradable.

Ya instalados, me prepararon un whisky, ellos también se prepararon y nos pusimos a platicar de cosas de la oficina de mi matrimonio, durante la plática me prepararon otro vaso con whisky, por cierto, lo sentí más fuerte que el primero, pero no dije nada… mientras lo tomaba sentía mi cuerpo muy caliente, sentía una sensación muy rica que recorría mi cuerpo y mis pezones se ponían duros… disimuladamente comencé a abrir y cerrar mis piernas y miraba de reojo como ellos se quedaban mirándome.

Como hacía calor me dijeron… “con ese saco que traes te has de estar muriendo de calor” ... les dije síííí, que sentía un poco, entonces Luis señalo uno de los botones y dijo que, “porque no lo desabotonas”, tomando un trago de whisky le dije, “si buena idea”, mientras Pedro, que estaba al lado, no dejaba de mirar como abría y cerraba las piernas, sentía que las recorría y me desnudaba con la mirada.

Desabotone el botón y mientras lo hacía Luis rozó mi pierna y me pregunto que si me gustaba jugar cartas y sin contestarle Pedro dijo… “juguemos póker”, mientras tanto Luis como yo no le decía nada... seguía ...