1. Trío en Vera


    Fecha: 17/07/2019, Categorías: Anal Autor: Perseo, Fuente: CuentoRelatos

    ... ella me masturbaba.
    
    Entretanto su pareja colocada al otro lado, se masturbaba mirando la escena. Este es un comportamiento bastante usual en estos casos. Para muchos hombres el atractivo de un trío no es participar, sino mirar como poseen a su pareja y cuanto más intensa y depravada sea la posesión, más se excitan.
    
    Poco a poco, la habitación/cama se fue llenado de gente y aunque cada cual sólo actuaba en principio con sus asociados, sean otra pareja o pareja con chico, en algunos casos comenzaron a salirse de su círculo y a cambiar de pareja o a añadir a un tercero a sus juegos. Esto normalmente se hace comenzando a acariciar un muslo o cachete de la chica a la que quieres incorporar a tus juegos y si no hay rechazo, poco a poco se va aumentando el nivel hasta llegar a felaciones y penetraciones. Si hay rechazo, la cosa no pasa de un gesto y rápidamente el intento se queda en nada. Evidentemente esto es un juego reciproco y si tú tienes pareja y comienzas a acariciar a la pareja de otro mientras tu pareja te hace una felación, por ejemplo, si no hay rechazo, estás invitando al otro chico a que se empareje con tu chica, de tal modo que se comienza con unos compañeros de juegos y se terminan mezclando todos con todos. Cierto que a veces, (las menos), hay disputas y discusiones.
    
    Después de un rato en esos juegos, decidí subir un poco el tono y comencé a acariciarle el sexo abriéndole los labios y tocándole el clítoris apretando el dedo y girándolo en un masaje rápido ...
    ... que alternaba con pellizcos moviendo el pulgar y el índice. Cuando vi que estaba suficientemente lubricada comencé a meterle el dedo corazón por la vagina mientras lo movía en círculos y notaba que se retorcía de placer. Después le saqué ese dedo y le introduje dos dedos, el corazón y el índice y cuando los tuve metidos lo más profundamente que pude, puse la palma de la mano hacia arriba y comencé a hacer movimientos de los dedos girando las puntas hacia arriba repetidamente buscando masajearle el punto G, al mismo tiempo que hacía movimientos rápidos con la mano de arriba abajo. Esto funciona en unos casos y en otros no. En este caso funcionó porque comenzó a gemir y después de tener convulsiones que eran claramente de orgasmo, se relajó y me pidió que parase un momento.
    
    No estuve pendiente, pero creo que su pareja en ese punto ya se había corrido porque estaba mirando la escena con el pene semiflácido
    
    Me tumbé a su lado y me puse a acariciarle los pechos mientras la besaba en la boca chupándole la lengua. Pasado un rato, parece que ya se repuso y de repente me dijo, “fóllame sin condón”, y acto seguido se puso a cuatro patas, invitándome a montarla desde atrás.
    
    Me puse detrás de ella de rodillas y después de comenzar a penetrarla, le iba introduciendo el dedo pulgar de la mano derecha, previamente lubricado en la vagina, por el ano, lentamente y todo lo profundo que pude para comenzar a moverlo en su interior.
    
    Ella tuvo al menos un orgasmo más para cuando yo ...