1. A mi mujer y a mí, nos hicieron el amor


    Fecha: 10/08/2019, Categorías: Confesiones Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... y el amigo me dijo que parecía una mujer verdadera. Mi mujer conversaba con el "pretendiente" y la cosa no me estaba gustando porque hablaban muy pegadito y en voz baja. Me levanté y simulando le dije a ella que me acompañara al baño, ellos se rieron y nos fuimos.
    
    Allá nos reunimos con los gays y les comenté la situación. Cuando mi mujer dice, mira, sigamos con el juego que está interesante y si pasa algo pues que pase en nuestra casa y probamos una nueva experiencia. Acepté pero con la condición que nada de sexo. Bueno, los tragos y la ropa de mujer me habían calentado tanto que no me importó lo que pasara y decidí llevar el juego hasta el final. Ya bien de madrugada ellos propusieron ir a otro sitio, es decir mi mujer con su pretendiente y yo con el amigo. Les dije que en la casa de al lado había un departamento de un amigo gay y que podíamos ir allá un rato más. Salí a bailar con mi "pretendiente" y ya en la pista se me declaró diciéndome que le gustaba mucho y que sabía que era hombre pero que le gustaba mucho.
    
    El me tenía de las caderas y yo los brazos en su cuello, ya me había a esa nueva situación. Antes de ir a la mesa él me besó y me gustó tanto que lo seguí besando. Al llegar a la mesa, ellos dos fueron a la barra a traer más trago y mi mujer ya medio borracha me dijo, quien lo creyera, te estabas besando con ese hombre y yo aún no lo he hecho. Bueno "amiga", me dijo, ahora es mi turno, está bien o no. Le dije que solamente besos y ella dijo, besos y caricias ...
    ... mi amor. Volvieron ellos y salí nuevamente a bailar, ya en la pista, veo que viene mi mujer con su hombre. Le puso los brazos al cuello y empezaron a besarse suavemente y luego más atrevidamente.
    
    Otra vez en la mesa, siguieron besándose y manoseándose. El le sobaba los muslos hasta subirle la falda y le metía los dedos en su vagina. Salimos del local y nos fuimos al departamento. Lo que pasó allí fue algo tan increíble que nunca lo olvidaremos. Mientras mi mujer entraba a nuestro cuarto con su futuro amante nosotros nos quedamos en la sala. Le pedí a mi amigo que viéramos como culeaban. Me acerqué a la puerta abierta y vi como la tenían a mi mujer. Estaban haciendo un 69 y ella se le comía la verga a ese hombre y el la chucha a ella. Era un espectáculo muy excitante.
    
    Yo estaba parado en el filo de la puerta pero un poco inclinado con la cabeza hacia el cuarto, cuando empezó mi turno. Mientras miraba lo que le hacía a mi mujer, sentí que "mi hombre" se me pegaba por detrás y me subía el vestido despacito. El me pidió que me inclinara más y lo hice. Justo en el momento que mi mujer iba a ser penetrada por su amante, que dicho sea de paso, tenía una verga bastante gruesa y larga, sentí que mi amante me hacía a un lado la tanga y se ponía a mamarme el culo. Era un gusto indescriptible ver a mi mujer como la tenían clavada hasta el fondo gritando de placer y yo con una lengua que me hacía ver estrellas del gusto. Cuando mi mujer más gritaba, sentí en mi culo algo caliente, ...