1. Érase una niña...


    Fecha: 18/08/2019, Categorías: Incesto Autor: RebeccaMoya, Fuente: CuentoRelatos

    ... situaciones de prostitución y no es nada agradable, pero me resultó atractivo y sobre todo desde ahí tenía la fantasía de cobrar por sexo, aunque fuera barato, sólo el hecho de recibir dinero por sexo era algo que deseaba en ese instante.
    
    Pasaba por tiendas y me chiflaban, no me molestaba todo lo contrario, me gustó. Aunque por mi mente pasó la idea de que sabían lo que era, una travesti. No fue hasta que el señor que iba en el auto regreso y se acerco, me dijo: ¿a dónde vas?- le contesté: no tengo rumbo.
    
    -Busco algo de compañía, hay un hotel cerca, podemos ir, no tengo inconveniente alguno.
    
    - Pero yo no soy...
    
    -Mujer- me interrumpió- Lo sé, es por eso que me gustas mucho, pareces una, y eso es lo excitante. Cuánto cobras...
    
    - Nada, sólo busco un rato ameno
    
    Y así me subí, me hablo de que le dolía la espalda, estaba ayudando a su familia en una construcción, yo le creí, pues estaba sucio, sudado, un asco total, pero eso lo hacía más interesante. Cuando llegamos a un hotel, me preguntaron edad y llevaba identificación, que si no, hubiera estado en casa y con un sucio secreto, pero subimos, el dijo que se bañaría pero le dije que no, me gustaba como se veía. Era más alto que yo, moreno, velludo, muy masculino con esa barba, aunque era calvo, tenía pocos destellos de cabello, casi nada. Vestía unos jeans maltratados, su ropa tenía tierra. Una camisa de cuadros de manga corta, le quedaba apretada, parecía que la usaba para trabajos de casa. unas botas.
    
    No me ...
    ... habo sucio, pero eso me prende, lo sabría en otro encuentro. Se bajo la bragueta del pantalón y saco su miembro. Moreno, gordo, no era muy grande. Sólo me dijo: vamos, haz lo tuyo- Sacó un billete de 100 y me lo dio.
    
    Lo tome con mi mano derecha, en segundos esa cosa estaba erecta. Lo movía para adelante y atrás, el gemía, no mucho, pero lo hacía. Por instinto lo metí a mi boca y le empecé a hacer una chupada, me tomo de la cabeza y como mi cabello es largo, llega a los hombros, sentí sus manos asperas. Fue cuando empujo mi cabeza con mas fuerza, sentí que me ahogaba. Fue delicioso, saco su pene y se sentó a mi lado, me beso, sentí mi erección, sus manos recorriendo mis brazos suaves con sus manos toscas, recorría mi cuello al grado que su respiración erizaba mi piel. Me acostó con una habilidad, parecía una momia. Con sus manos desabrochó mi short y me hizo un delicioso sexo oral, picaba pero el realmente sabía aprovechar todo su instinto. Fue hasta que subió por mi vientre, y llego a mi pecho, su respiración era lo más delicioso, pero no se detuvo, chupo mis pezones - que suaves- mencionó, no dejaba de masturbarme mientras besaba y lamía.
    
    Nunca tuve una nena como tú, suave y tierna- seguía entre respiraciones y comentarios... Me despojo de mi short y sin inconveniente alguno sentí su miembro humedo y firme en mis nalgas, listo para entrar, tenía miedo iba rápido, pero se detuvo, se puso un condón, se escupió los dedos y poco a poco me los metía. Explote, gemí y empezaba ...