1. Soy trans soy Valeria y esta es mi historia parte 5


    Fecha: 20/08/2019, Categorías: Transexuales Autor: youngwulf, Fuente: RelatosEróticos

    ... que sentí los bellos tiesos de sus bigotes en la planta, me picaron de tal manera que me dio risa.
    
    Mario – señorita sus pies son hermosos.
    
    Valeria – jeje enserio?
    
    Mario – así es son suaves, delicados y su olor es suave como toda dama debería ser.
    
    Yo solo agradecí mientras seguía observándolo. Me sentí extraña pues al bajar mi pie lo puso justo al lado de su cremallera, al tomar mi tobillo izquierdo me hizo perder un poco el equilibrio haciendo mover mi pie derecho cerca de su entrepierna, como si me aferrara con los dedos de los pies cerca de su parte, el señor Mario solo se dedicó a seguir con su trabajo, aprovecho para quitar según él una pelusita entre mis dedos, sentí como metió su dedo entre mi dedo pulgar y medio, sus dedos eran regordetes y abrían mis dedos, en ese momento mi mente al ver cómo me abría los deditos, sentí como una penetración, comencé a excitarme, pues me tocaba con tanta delicadeza y tocaba lo que nadie ni yo misma exploraba, comenzó a acariciar mi pie, sentía sus dedos masajear desde mi talón hasta los dedos, acerco mi pie a su nariz y ya de manera más descarada sentía su inhalación profunda, no podía creer que estuviera oliendo mis pies y que yo lo estuviera permitiendo, pues no lo veía tan malo, si me iba a regalar los zapatos quería dejar se divirtiera un poco. Pero ese jugueteo me estaba calentando, comenzaba a sentir las primeras gotitas de líquido pre seminal en mi entrepierna.
    
    El señor Mario tomo mis dos tobillos y los elevo ...
    ... haciéndome recostar sobre el sillón lo más que pude, mis pies ya estaban siendo acariciados por su bigote, cuando sentí un beso en la planta de mis pies mientras los mantenía juntos, yo trate de levantarme.
    
    Valeria – no señor Mario! Que hace!
    
    Mario – por favor, es parte de mi trabajo hacerla sentir bien.
    
    Terminando para que me calmara, me puso una sandalia justo a la medida, era tan erótico lo que me estaba haciendo, la correa que se detiene en el dedo gordo, la subía y bajaba hasta hacer presión para írmelo quitando lento, me recosté de nuevo ya dejaba que hiciera lo que quisiera, mis pies siempre terminaban en sus labios y su bigote, los apretaba contra su cara, sus manos solo llegaban hasta mis tobillos y regresaban, jamás se propaso hacia algo más atrevido, sus dedos gordos penetraban sin mi permiso y cuando los ponía duros y forzaba entremeter sus dedos en los míos, me excitaba aún más, solo puse mis manos con mis puños cerrados cubiertos por la sudadera en mi boca, para sentir como forcejeaba para penetrar entre mis dedos, cuando sentí un ataque de besos, abría sus labios para mordisquearme la planta de los pies, seguido de una lengua ancha y flácida recorrer desde mi talón hasta la punta de mi dedo índice del pie. Ya me estaba lamiendo los pies y yo cada vez perdía mas mis fuerzas, cuando reaccione de nuevo ya tenía mis dedos en su boca, me los babeaba tanto, los succionaba lo hacía tan tierno y tan delicado como si hiciera sexo oral a mis dedos.
    
    Valeria – ...