1. Hermanos sin tapu cap 9


    Fecha: 02/09/2017, Categorías: Incesto Autor: Crystal69, Fuente: SexoSinTabues

    ... hijas… Dios, qué tiernas se ven. —Te quiero Andrea —dijo mi hermana. Me di media vuelta y ella se puso a horcajadas sobre mí. Sus manos sobre mis tetas y las masajeó suavemente, jugando con mis pezones mientras yo podía sentir sus jugos mojándome el ombligo. —Tijeras —dijo papá. Nosotras nos miramos coquetas. Primero separé mis piernas y acomodé a Estefy entre ellas. Nuestras vaginas entraron en contacto. Los jugos de mi hermanita y los mios se confundían y nuestros clítoris se rosaban tan deliciosamente que comenzamos a frotarnos entre sí. Nos mirábamos a los ojos como dos enamoradas haciendo el amor. Luego desviamos la vista hacia nuestra entrepierna, donde nuestros labios en contacto se acariciaban y se separaban mutuamente, permitiendo que nos uniéramos más. Finalmente papá que se estaba masturbando como loco, dijo que se iba a correr. —Hazlo aquí —señalé y él acercó su polla justo en el punto donde nuestros coños se tocaban. Allí descargó una carga de semen delicioso y caliente. No dejó una sola gota dentro de sus huevos, y ahora con esa sustancia para lubricarnos más, Estefy y yo seguimos haciendo tijeras, embarrándonos la leche de papá y masturbándonos ágilmente. La polla no volvió a erectarse durante unos segundos, pero yo quería seguir con el sexo. Una vez nuestras vaginas estuvieron cubiertas de semen, Estefy se dio vuelta y colocó su coño justo sobre mi boca. El sabor de sus jugos mezclados con la lechita de papi le dio un nuevo sabor. —Papi, tienes una llamada ...
    ... —avisó la voz de Ángela. —Ah, voy. —¿Qué hacen? —nos preguntó mi gemela. —¡Ven! —le pidió Estefy, y aunque yo lo dudé un segundo, Ángela cerró la puerta tras de sí y tímidamente se acercó a la cama —¿no crees que la vagina de Andrea es riquísima? —Bueno, somos gemelas. Mi coño es igual al de ella. —¡Jeje! —rió mi hermanita y siguió comiéndome el clítoris. Ángela se sentó al borde de la cama y comenzó a acariciar la espalda de nuestra hermana menor. —Esto sí me gusta —admitió —, prefiero ver a dos chicas chupándose el culo que a mis padres. —Entonces ¿te nos unes? —Ah… no lo sé. Yo… —Prueba la de Estefy —le sugerí —es un tanto especial. —¿Y por qué? —Pues… está muy apretada. —Claro, es virgen. —Tienes que hacerlo —repliqué. —Creo que me abstendré por ahora. —Eso sí que no —le gritó Estefy y rápidamente se lanzó sobre Ángela. Ella se resistió pero no por mucho tiempo porque cuando su hermana la besó en la boca, se dejó querer. Era extraño verla porque era mi gemela. Aun así Ángela abrazó a Estefy por la cintura y correspondió a sus besos de una forma más romántica que lujuriosa. A ella sí que le fascinaban las mujeres. Lentamente levantó el cuello de la pequeña chica y le dio de besos amorosos por toda la piel hasta bajar a sus senos. Yo me quedé quieta, mirando como Ángela se comía los pezones rosados de la la muchacha y le juntaba las tetas deslizando su lengua por las dos. —Listo, eso es todo lo que conseguirán de mí. —Pero ¿cuándo tendremos sexo las tres? Somos hermanas, por ...