Perra obsesión (2)
Fecha: 27/08/2019,
Categorías:
Hetero
Autor: Horny, Fuente: CuentoRelatos
Continué con mi trabajo como masajista en el Spa y aunque el que Diana regresara por esos lados era una posibilidad no podía fiarme de ello por completo, tenía que ir un paso adelante, asechar sin tregua a mi presa, ir cerrando el lazo en torno a ella y cuando no tuviera escapatoria posible comenzar a apretar.
En mi casa sola esa noche recordé el breve, pero especial momento en que la había visto en cueros. Mi vida cambió desde que había masajeado su cuerpo. En serio veía las cosas desde otro punto de vista. No sé cuál, pero de que era otro lo era. Solo sabía que la amaba y la odiaba, estaba obsesionada con ella, quería adorarla y acabarla; nunca una persona había despertado en mí sentimientos tan encontrados como Diana, nunca había amado a otra mujer y la experiencia me estaba costando la vida y el sueño, nunca me había masturbado tanto por alguien hasta el punto de que con solo rozarme el clítoris un par de minutos pensando en ella me corría.
Cada día soñaba con pasar de nuevo mis manos ansiosas por la hermosísima piel de durazno de Diana, con recorrer su cuerpo, poseer cada uno de sus poros con las yemas de mis dedos… y me maldecía por no hallar la manera. Yo, Valentina Ríos, que siempre había sido tan recurrente, tan imaginativa, no sabía qué hacer. Opté por tranquilizarme, mi ansiedad estaba actuando en mi contra nublándome el cerebro.
En contra de todo pronóstico Diana Camargo, mi obsesión y Carmen Suárez su inseparable amiga, regresaron el sábado siguiente ...
... al Spa pero por alguna extraña razón procuraban no cruzarse conmigo como si yo tuviera una especie de peste o algo así. El rechazo de estas dos mujeres me parecía excesivo, sin motivo, no me cabía en la cabeza. Si yo estaba en un lugar ellas no entraban, si yo llegaba ellas salían o simplemente me ignoraban, era como si silenciosamente me hubieran declarado la guerra.
Lo que ellas no sabían es que lentamente había comenzado a maquinar un plan. Aún no lo tenía elaborado del todo pero la primera fase era observarlas, escucharlas, estudiarlas, analizarlas y hablo en plural porque estas dos eran inseparables. No llegaba al punto de disfrazarme como una detective pero si procuraba pasar desapercibida para espiarlas y lo disfrutaba mucho, al fin estaba teniendo un pequeño poder sobre Diana, algo estúpido, pero algo es algo.
Siendo objetiva, también su amiga estaba muy bien, incluso mejor físicamente. Me gustaban enteras, absolutamente enteras, con curvas de verdad, con cosas bien puestas, cosas colgantes sin vergüenza y sobre todo clase y elegancia. Aunque Diana era más menudita me encantaba así, era un sueño húmedo construido por las mentes en línea de todos los pajeros del mundo unidos.
Diana Camargo y Carmen Suárez… no pensaba en otra cosa…. Carmen es rica, exquisita en rigor, pero Diana es perfecta, Carmen de 1,75, Diana de 1.60, con una sonrisa sin ninguna falla, Carmen con tetas de lujo, pero las de Diana mejores, Carmen con sus nalgas medio caídas, Diana con firmes ...