1. Solo un lugar para dos


    Fecha: 26/09/2019, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: Johnny2009, Fuente: CuentoRelatos

    ... muy fuerte a la vez que exclamo —Donde te metes que no te veo como antes? —Mira! vengo a hacer algunas compras y ya me voy de nuevo para el campo — me dijo un poco apurado. Allí se me ocurrió la idea de contarle mi situación a lo que enseguida me confirmo — —Siiiiii cómo no? metele nomas!! Ya avisándome ya sé que sos vos. Anda tranquilo y entra por la tranquera derecho al tambo y ahí no te va a molestar nadie —Con la misma le agradecí el favor y nos despedimos con otra apretada de manos.
    
    Bueno —Pense, espero que a Patri le guste así que pase por la casa y le avise que se estuviera lista que esa noche iríamos a bailar nuevamente como todos los sábados. Cuando la pase a buscar me sorprendió su belleza, aunque no era de alta gala pero su vestimenta le quedaba perfecta. Tenía una remera sin mangas, con un gran escote que dejaban ver sus hombros de piel blanca con pequeñas pecas que sobresalían por sectores como estrellas en el cielo, su pollera era de jean bastante corta con cierre de adelante y unas sandalias de taco color roja que hacia juego con sus labios y su cartera. Realmente sabía que me luciría con esa mujer y en verdad no me equivoque. Las miradas se centraban en su voluminosa delantera y en su abultado culo que había heredado seguramente de familia.
    
    Cuando la orquesta empezó a tocar fuimos uno de los primeros en salir a la pista, al principio podíamos bailar bien, cómodos, pero una hora después el salón se empezó a llenar de gente, hacía mucho calor, además se ...
    ... hacía imposible seguir un paso cuando todo el mundo se empujaba y la multitud te llevaba para donde quería.
    
    Entonces note la incomodidad de Patricia y le sugerí al oído que nos fuéramos de allí o por lo menos salir a respirar un poco de aire puro. Ella asintió con su cabeza debido a la música fuerte y de inmediato salimos a la calle, llegamos al auto y subimos. Yo sin decirle nada comencé a dar vueltas por las calles sin rumbo fijo, ella se había ubicado casi enzima mío y su mano permanecía en mi pierna cerca de mi ingle. Cuando me di cuenta de su movimiento me empezó a provocar una erección tremenda, entonces soltando una de mis manos del volante, la metí entre sus piernas, la que enseguida acaricio como aceptando mi acción y me respondió con un besito.
    
    A las pocas cuadras pare el auto y nos comenzamos a besar muy apretados y mientras ella metía su mano en mi pecho peludo yo buscaba la forma de acariciar sus enormes tetas que ya delataban unos pezones súper hinchados debajo de su remera.
    
    —Sabes una cosa? — le dije al oído...tengo un lugar para estar solos querés ir? —Si mi vida a donde me lleves esta bienes contesto con toda dulzura.
    
    Yo parecía estar en la misma luna que brillaba como nunca sobre el firmamento, de inmediato arranque para el campo de mi amigo y después de varios minutos llegamos. Entre por la vieja tranquera y como la noche estaba bien clara divise el tambo donde a pocos metros de llegar estacione y prendí la radio. Aquella noche de verano era tan ...