Mujer casada suplanta a una stripper por su parecido
Fecha: 28/09/2019,
Categorías:
Incesto
Autor: SANDY C, Fuente: CuentoRelatos
... quedar. Me prometí no volver a hablarme con Paola, ni con el sexólogo ni con Karla. Cambié el celular y todo quedó atrás.
Eso fue lo que creí por un buen tiempo.
Pero llegado el día de mi cumpleaños, que yo llegaba a casa, vi que las luces estaban apagadas y pensé que mi esposo se había olvidado de este día, me sentí desilusionada.
Tan pronto como abrí la puerta y encendí la luz de la sala….PUUUMMMM sorpresa!!!!!!
Mi esposo se había encontrado días atrás con el sexólogo y con Paola y los había invitado a que le ayudaran a celebrarme el cumpleaños. La sala estaba decorada con serpentinas, confites, bombas y avisos alusivos a mi cumpleaños; una torta, copas y botellas de champaña.
Aunque confieso que se portaron muy bien, mi temor en mi interior no me dejaba tranquila, pero debía fingir con una sonrisa de lado a lado y es que tarde o temprano mi temor se iba a evidenciar, pues Paola me aseguró que mi esposo no conocería a Karla, lo que quería decir es que muy pronto volvería a encontrarme con Karla.
Así fue, pero no como yo debía temer. Con los días de volver a ver a Karla surgieron nuevas experiencias y….nuevas sugerencias que despertaron en mi…..significativas fantasías…que decidí llevar a cabo.
A la semana y media Karla me llamó y me pidió que hiciera un reemplazo en un sitio reservado donde la señora sabía de lo mío y lo de ella, Karla. Allí ella solía tener una niña diferente por día en la semana y luego repetía la ronda en la semana siguiente. Karla ...
... me explicó el servicio y me pareció sencillo en comparación con la experiencia anterior, por lo que acepté ir.
En pocas palabras solo era hacerme pasar por ella, por Karla y entre las 2 acordamos de cortarnos el cabello hasta el hombro. Para ese día decidí llevarme un short de bolsillos color cake con una blusa amarilla también de bolsillos, algo medio militar en su diseño.
De entrada estaba la sala y al otro costado de esta estaba un pasillo que llevaba al resto de la casa. Ella medio me dio una ligera explicación del servicio, el costo para el cliente y la utilidad tanto para ella (pieza), como para mí por mi servicio.
Aunque no era mucho lo que iría a ganar, eso no me importaba; era así como un servicio económico en un reservado, prestado por una chica hermosa muy complaciente….para echarse un polvo muy discreto a un precio cómodo.
Ante el primer cliente salí a la sala presentándome tal como había llegado y el cliente se fue sin tomar servicio, pues se imaginó que el servicio tendría una tarifa alta, a lo que la señora me pidió presentarme de manera sugestiva, mostrando piel, sugiriéndome un Babydolls blanco con hilo dental transparente, zapatos que yo llevaba, blancos, sin sostén; eso haría creer que estaría más al alcance del poder adquisitivo del próximo que llegase.
Tuve que tener mucha paciencia, pues hasta estuve a punto de cambiarme y salir de allí, pero ella, la dueña me pidió esperar un rato más y acepté.
20 minutos después llegó un cliente y se ...