Aldana, su papá y yo
Fecha: 19/10/2019,
Categorías:
Intercambios
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... primero de mi vida, y sabia que se lo debia a Francisco y a Aldana. Despues de lavarme la vagina delicadamente y los muslos, que habian quedado chorreados de mis propios liquidos, me fui a la cama. Al llegar escuche la respiracion acompasada de Aldana y supe que estaba profundamente dormida. Despues de esa noche en que vi que clase de relacion unia a Aldana con su padre, comprendi muchas cosas mas de la vida de ambos Al dia siguiente nos levantamos alrededor del mediodia, asi que no desayunamos mas que una frugal taza de cafe y nos quedamos a ver la tele ya que hacía mucho frío, hasta que llego Francisco y a la media hora la empleada nos sirvio el almuerzo. De no ser porque yo ahora sabia lo que los unia, mas alla de la relacion padre e hija, nada los habria delatado. La conducta de ambos era incuestionable, pero ahora yo estaba mas alerta a los pequeños detalles y eso no paso desapercibido para ninguno de ellos. Francisco me pregunto cuando seria el momento en el que yo le contara que tenia novio, me rei diciendole que en verdad no estaba en mis planes ese tipo de relacion siendo aun tan joven. De esa respuesta dedujo entonces que yo aun no habia tenido relaciones sexuales con nadie, cosa que le confirme sin el menor pudor. Aldana, a lo largo de esta charla que tenia con su padre, permanecia callada, solo se limitaba a comer en silencio. Eso me estaba dando la pauta de que ambos sabian que yo los habia visto, seguramente Aldana lo supo primero y se lo comento a su padre y ...
... eso, en lugar de inquietarme, solo me excitaba, era una sensacion rara, pero real. No podia negarme a mi misma que ninguno de los dos para mi serian los mismos despues de lo sucedido anoche, Aldana seguia siendo mi mejor amiga, pero ademas habia pasado a ser una mujer, su imagen gozando bajo las manos de su padre se colaban en mi mente cada vez que la miraba, me era imposible no revivir cada movimiento de su cuerpo disfrutando en aquella cama enorme. Francisco me excitaba, ahora mirarlo era casi provocarlo, de la noche a la mañana habia dejado de ser el padre de mi mejor amiga para convertirse en un hombre al que deseaba, en un hombre al que queria haber tenido entre mis piernas, en un hombre que me habia dejado caliente al ver como acariciaba y hacia gozar a otra mujer (porque esa habia sido la sintesis de mi mente, Francisco podia hacer delirar de pasion a una mujer) y sabia que era eso lo que, de ahora en mas, querria para mi. De pronto me revele como una adolescente capaz de todo, con tal de vivir aunque sea medio segundo del placer que habia espiado la noche anterior y no importaba si ese placer me lo iban a dar Aldana o su padre. Ellos, sin saberlo, habian encendido la mecha de deseo que anidaba en mi interior y parecia dificil de apagar facilmente. Ese dia siguio con algo de nerviosismo para mi, pero era logico, asi que me dedique a tratar de calmarme y ver como se iban a desarrollar los hechos, porque me quedaria también ese sábado y hasta el domingo al mediodía con ...