Otro polvo con la zorrona de Elena
Fecha: 11/09/2017,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: zorro_en_celo, Fuente: CuentoRelatos
... entrar en su portal, ya iba todavía más rijoso y lascivo, sintiéndome más semental y follador de putas depravadas en celo.
Al entrar en el ascensor había un fuerte hedor a perfume de mujer y eso aumentó de por sí, mis ya elevadas ganas de joder viciosamente a esta puta guarra de Elena.
Salí con un todavía más elevado calentón y empalmado, directo a la puerta de Elena.
Llamé y oí un "espere un momento", que me puso un poco nervioso y abrió.
-Hola cariño, ¿estás preparado? -expresó Elena.
Llevaba puesto un bikini rojo puta que era muy obsceno, depravado, lujurioso y libidinoso y que remataba con unos zapatos de tacón de aguja a juego.
Me quedé alucinado al ver lo buena que estaba esta licenciosa y sexy golfa en celo.
-Que rica estas, muñeca -expuse yo.
-¿qué? ¿te gusto? -agregó ella.
Nos dimos un largo morreo con lengua que me puso más cachondo, vicioso y más salido todavía. Me llevó de la mano a su habitación y me miró pícaramente y con lujuria.
-pareces un auténtico chulo de putas -afirmó Elena- me gustas, cabrón -agregó.
Y me tocó el rabo por dentro para averiguar mi temperatura sexual.
- estás empalmado, cabrón. ¿Tanto te gusto? -y Elena volvió a sonreír.
Al llegar a su cuarto, me rodeó otra vez con sus brazos y me volvió a pegar otro lascivo morreo que me pareció una eternidad sexual, pues nuestras lenguas se entrelazaron con fuerza e intensidad.
Ella notó que estaba terriblemente empalmado, porque mientras nos comíamos las bocas, ...
... su vientre chocaba contra el mío y le cautivaba y seducía que yo estuviera así.
Nos separamos y salió mucha saliva de nuestras bocas y era por el calentón que teníamos.
Empezó a desnudarme y al ver que yo llevaba el sexy y obsceno tanga muy lascivo que a ella le hacía ponerse más puta zorra dio un gruñido de aprobación y entusiasmo sexual y me pegó un lascivo y procaz lametón en la zona del rabo.
Siguió desnudándome hasta dejarme solo con el tanga y me lo magreaba y me hacía algo de daño y eso me excitaba más sexualmente y estaba encantado con el dolor que me producía la guarra de Elena.
Ella me esperaba ardiente, caliente y muy obscena y me hacía señas con un dedo para que me acercara a ella.
Mientras, se tocaba viciosa e impúdicamente su coño.
Yo iba hacia ella con el tanga puesto y con el rabo bien enhiesto y duro por fuera, nos pegamos otro morreo corto mientras nos tocábamos los sexos y yo le lamía y mordía cerca de la barbilla hasta llegar al cuello y cerca del hombro mientras ella me tiraba del rabo haciéndome algo de daño.
Continuaba tirando de mi cipote de chulo y ella tocaba su empapado sexo de zorra caliente.
Elena me arrancó con fuerza lujuriosa el obsceno tanga con su boca y mientras ella babeaba y volvía a tirar de mí ya duro cipote y la comenzó a succionar.
Tragaba y mamaba mi cipote mientras yo lamía su espalda y situaba mi sabia lengua en la oquedad de su sensual culo.
Yo lamía y lamia su ojete y ella berreaba, gañía y bramaba de ...