Esposa Infiel: Sandra y Leticia
Fecha: 21/11/2019,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... cuerpos y sellaron con un beso el clímax alcanzado.
Tuve que salir del cuarto para ponerme un par de hielos ya que mi venida era inminente, de paso fumar un cigarro.
Cuatro huecos solo para mi
Luego de un buen rato regrese, ambas se acariciaban la espalda, las tetas, las nalgas, la pasión con que se besaban, no decían palabra alguna… hasta que Sandra exclamo: Leti tenemos a un espectador de lujo y está listo para que nos atienda, señalándome ¿Qué dices lo invitamos?
Verdad, me había olvidado de mi casero – contesto Leticia; ambas me miraron sonrientes estirando sus manos para que me les una.
Me acerque a ellas, ¿no sabes cómo extraño tu pinga? ¡Mi consolador no es lo mismo! – exclamo Sandra, llevándose mi verga a la boca y comenzar con una buena mamada, Leticia me acariciaba el pecho, ambas comenzaron a impartirme una mamada de campeonato, indescriptible, los que han tenido la suerte de hacer esto saben de lo que hablo, inenarrable, porque no sé cómo describirlo.
Una me chupaba la verga, la otra me succionaba los testículos, uff, se turnaban para llevársela a la boca, la escupían, la lengüeteaban, uff, de solo recordar ya estoy empalmado otra vez, ponían mi verga entre sus tetas para hacerme una paja rusa. Con una sobre estimulación a cuestas por lo observado y ahora con dos lenguas que trabajaban mi verga, mi corrida era inminente, no quería llegar aun, Leticia espera, espera, que no se venga aun, disfrutemos con él – hablo Sandra. Leticia soltó mi verga ...
... y asintió con la cabeza. Tenía una erección descomunal, jamás había tenido una así, mi verga estaba más grande y gruesa, totalmente empalmada.
Terminaron de desvestirme, Sandra se echó sobre Leticia y comenzó a besarla, la tome por las caderas para empezar a penetrarla, pero ella esquivaba mis intentos, Lunatacas espera, la noche es para Leti – me dijo Sandra, acomodando almohadas bajo las nalgas de Leticia, a quien tome por sus piernas y sin más la penetre, ahhhhhh, que rico, ahhhhhh, siento tu pingota en mi coñito, ahhhhhh – me decía Leticia, cogí por las caderas a Sandra y trataba de llevar el ritmo, mis dedos penetraron la vulva de Sandra y empezó el desenfreno.
En un cambio de planes, penetre a Sandra hummmmm, sí, hummmmm, sí, hummmmm, que rico – dale Lunatacas métemela toda, hummmmm, que rica pinga, hummmmm.
Después de un rato de intercalar entre una y otra, ahora Sandra estaba echada y Leticia encima, penetre a Leti, ahhhhhh, que rico, ahhhhhh, sí, ahhhhhh – gemía besando a Sandra, mientras Sandra con sus dedos estimulaba el clítoris de Leticia.
Había apreciado el hermoso culo de Sandra, coronado por el tatuaje tribal que lo más apetecible aun y ahora veía el esplendor del culo de Leticia, la marca del bikini sobre su piel bronceada hacia que mis arremetidas sean más fuertes.
A cada embestida sentía pequeñas descargas eléctricas, el estímulo recibido era intenso, Sandra se encargaba de las tetazas de Leticia, mientras yo la taladraba en perrito, en un ...