1. Amor y odio (Parte 3 de 5)


    Fecha: 22/11/2019, Categorías: Incesto Autor: dulces.placeres, Fuente: CuentoRelatos

    ... dedos, apunté en su esfínter, el primer intento resbaló y se metió en su concha, no era esto lo que quería.
    
    El segundo intento fue mejor, pero ella se retiró hacia adelante, seguramente invadida por el dolor inicial, le di una fuerte nalgada y le dije amenazante
    
    -Puta, quédate quieta y sacá culo, te la aguantas, entendiste?
    
    Emily estaba enloquecida, podía notarlo, fui por un tercer intento, mi glande sintió la fuerte presión de su esfínter que se resistía a mi avance, poco a poco su músculo fue cediendo, mi sexo se introdujo en su culo, empujé hasta el fondo.
    
    Empecé a darle con lujuria y firmeza, por completo, en cada embate, al fin su culo era mío, ella estaba enloquecida y gemía como nunca la había escuchado gemir, cada tanto intentaba poner distancia por la que la halé de los cabellos, animal, salvaje como a ella le gustaba, mi enojo solo la excitaba, sus nalgas repiqueteaban una y otra vez contra mi cuerpo, sus carnes ondeaban como olas eternas, pronto me haría acabar, puta…
    
    La tumbé de costado, ella cayó con facilidad por tener las manos atadas, fui sobre su rostro, le di una cachetada, le pedí que abriera la boca, le metí la verga dentro, empujé y empujé, lo suficiente para que se comiera los poco más de quince centímetros que tengo, suficientes para hacerla tener arcadas y que comenzara a babear, sentí placer en la profundidad de su boca, las lágrimas volvían a salir de sus ojos, me sentí venir, fui violento, descargando mi ira, acabé, fue loco, pero ...
    ... mi leche caliente empezó a brotar de sus fosas nasales, me gustó, jamás había vivido algo así…
    
    Me retiré satisfecho, esperando que me dijera que tal le había parecido, pero ella, con un rostro sucio, mezcla de saliva, lágrimas y semen que chorreaba de su nariz empezó a reírse a carcajadas, esto me desconcertó, no era momento para risas, pregunté
    
    -De que te ríes?
    
    -Es que eres un tonto… de verdad pensaste que el uruguayo me la había dado por el culo?
    
    -Cómo qué no? es lo que me dijiste…
    
    -No tonto… termino de regalarte mi cola, es mi primera vez… y tú solo te ofuscas…
    
    Emily empezó a acariciarse en medio de las palabras, y si por algo faltara terminó masturbándose como perra mientras yo miraba atentamente.
    
    Los días pasaron, seguimos cogiendo como amantes, pero ella no solo estaba conmigo, ella también estaba con ese uruguayo, eso me enervaba, pero más me molestaba que parecía que más tiempo compartía con Emily, más parecía desconocerla, yo no sabía si realmente fui el primero en hacerle la cola, no sabía cuándo decía la verdad, tampoco cuando mentía, tampoco sabía que le decía a ese muchacho, si él sabía de mí, ella solo jugaba conmigo a verdades y mentiras, ella era el titiritero que movía los hilos de mi cerebro, yo solo sabía que no podía estar sin ella…
    
    Nuevamente regresé a Buenos Aires, y si en mi primer regreso estuve atontado por esa mujer, ahora estaba enloquecido, nos escribíamos a diario, mandaba sus fotos, insistía con esa frase tan suya ‘tengo ...