-
Un hombre casado (mecánico) me convierte en su puta. Parte I
Fecha: 27/11/2019, Categorías: Gays Autor: EduardoDz, Fuente: SexoSinTabues
Siempre fui un chico muy enamorado y siempre tuve, desde niño, a otros chicos que me miraban mucho o me trataban muy bien. Así que lo que me pasó con este hombre fue algo que no pensé que me pasaría. Nunca había tenido relaciones sexuales, era un adolescente tranquilo, y aunque era gay, muchos no lo sospechaban, pues no era afeminado, y además era muy tranquilo... todo eran fantasías y miradas discretas con otros chicos. Pero este hombre, amigo de la familia, me ofreció trabajar para él un verano... ––Así te ganas un dinero extra y puedes sacar a pasear a tu novia –dijo con una sonrisa frente a mis papás. A mis papás les pareció una buena idea. Yo no tenía novia, apesar de que muchas chicas iban a buscarme a mi casa, y tenía montón de amigas en la escuela. Pero me pareció también buena idea contar con dinero. Él era un hombre musculoso, para nada atractivo, pero muy varonil y buen porte. Voz gruesa y mirada fuerte. Moreno y ojos negros, con buen cuerpo. Junto a él yo me veía muy delicado, en aquel entonces... El primer día de trabajo fue por la mañana y todo pasó normal y aprendí varias cosas. Era en un taller mencánico. Terminé sucio y cansado, y él me dijo con una sonrisa que me esperaba mañana. Así continúo la semana normal, pero comencé a notar que él no permitía que los otros dos hombres que trabajaban ahí me hablaran mucho o me ocuparan en cosas... Sólo quería que estuviera a su lado, y de vez en cuando, me tocaba la cadera cuando me indicaba a donde moverme o ...
... deslizaba su mano por mi pierna y de pronto me tocaba las nalgas con alguna herramienta o su brazo y se disculpaba; al final del día me limpiaba la cara y acomodaba mi cabello, felicitandome por ser tan trabajador. Pensé que era muy amable y atento conmigo... Un día que nos quedamos solos me dijo que él me llevaría a mi casa, así que lo esperé sentado en el taller mientras él se cambiaba de ropa. Salió vestido muy elegante, con una camisa desabotonada en la parte superior, mostrando su pecho peludo y unos pantalones apretados que marcaban su paquetote. Me miró con una sonrisa, y se dispuso a tomar unas cosas mientras yo le veía el culo y sus piernas, y brazos marcados en la camisa. De pronto se giró y me descubrió viéndole, pero no dijo nada. Cuando llegamos a mi casa, mi papá estaba afuer en el patio y él se quedó platicando con él, pero cuando me despedí, él tenía su brazo sobre mis hombros y lo deslizó hasta tocarme el culo muy descaradamente. Me sentí extraño pero supose que había sido casualidad. Esa tarde, cuando se fue, mi padre me dijo que él me ocupaba para unas horas especiales en el taller el día de mañana. ––¿Cómo que especiales? –pregunté. ––Será de noche –dijo mi papá. ––¿Por qué de noche? –dije confundido–. Mañana iba a ir al cine con mis amigos. ––Él insistió en que debías ir, aparte que quiere enseñarte algo nuevo, dijo que no tenía más quien le ayude a esa hora. Me molesté un poco, pero mi papá insistió y dijo que yo me había puesto esa responsabilidad. Además, que ...